A la hermana le informaron de la dolencia en una de las pruebas rutinarias de la florecimiento. La bebé que estaba esperando sufría un tumor cardiaco denominado teratoma pericárdico que estaba comprimiendo su corazón.
Desde ese momento, aproximadamente en la semana 24 de florecimiento, derivaron su caso al Hospital La Fe donde se inició un protocolo exclusivo de seguimiento con un tratamiento de punciones hasta que los facultativos se dieron cuenta de que el tumor estaba creciendo de una guisa tan agresiva que se ponía en aventura la vida de la bebé y de su hermana.
Fue entonces cuando se reunió la comisión de malformaciones fetales del Hospital La Fe para lanzarse qué pasos seguir con el objetivo de que la vida de la pequeña saliera delante. Este comité, integrado por especialistas en obstetricia, neonatología, genética, cirugía, cardiología, neurología y radiología pediátricas, optó por iniciar un tratamiento de técnicas para aliviar la compresión del tumor y evitar así un principio prematuro. Seguidamente, en la semana 28 de florecimiento, en julio de 2023, conveniente a la alcance extrema de su estado, decidieron realizar la intervención.
Raquel Escrig, jefa de la sección de Neonatología de La Fe, ha explicado a torrevieja news today Informativo que la operación era de “detención aventura” porque “la paciente podía sucumbir inmediatamente tras cortar el cordón umbilical”. Por eso, se llevó a angla una cesárea y se mantuvo a la bebé, de tan solo 900 gramos de peso, unida a la placenta mediante la técnica conocida como ‘EXIT’ (Ex Seno Intrapartum Treatment). Escrig ha señalado que “es un tumor poco frecuente que le comprimía estructuras vitales como el corazón”.
Para realizar la intervención se articuló un activo de más de treinta profesionales que trabajaron divididos en dos equipos: uno para la mamá y otro para la bebé.
Sonia Garcés, experto en anestesiología pediátrica del Hospital La Fe, ha precisado que, tras la cesárea, “se mantuvo conectada a la mamá mediante su circulación útero-placentaria con lo que se logró que estuviera estable hasta que se intervino de forma inmediata tras el principio”. Por otra parte, ha añadido que dos meses más tarde “se le intervino de nuevo para resecar los restos de tumor que habían quedado y porque además había crecido poco”.
Garcés además ha comentado que es un “caso extraño” por tratarse de una “bebé prematura”. “En la humanidades científica existen escasos reportes de niños que, con tan bajo peso, hayan sobrevivido sin secuelas a estos tumores”, ha asegurado.
Actualmente, a posteriori de permanecer varias semanas en la UCI y de ser intervenida de una segunda cirugía tuvo que cobrar dos ciclos de quimioterapia en oncología de niño del Hospital La Fe. Actualmente, la pupila está sana y expedito de enfermedad.
Para el regente del Hospital La Fe, José Luis Poveda, “la coordinación y la experiencia de los profesionales de nuestro hospital han sido la esencia para el éxito de esta operación. Se trataba de un pelea muy enrevesado que supone un hito fundamental en el tratamiento de los tumores cardiacos en bebés prematuros”.
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