La Semana Santa es época de torrijas, procesiones, nazarenos, y asimismo de indultos. El Consejo de ministros acaba de aprobar un total de seis, que fueron solicitados por diferentes Cofradías. Se proxenetismo de cuatro mujeres y dos hombres, internos en centros penitenciarios de Salamanca, Santander, Audaz, Sevilla, Explosivo y Málaga. Todos ellos tenían penas inferiores a cuatro abriles y tenían el segundo o tercer extremo. Eso sí, para su puesta en facilidad, es necesario que la Fiscalía haga un mensaje benévolo.
Pero, ¿es anacrónico conceder indultos por Semana Santa? Esta costumbre se remonta a unas cuantas décadas, cuando la sociedad se regía más por las tradiciones. José María Urdiales, sacerdote de la cofradía del Santo Cristo del Perdón, cuenta a Espejo Notorio que desde su fundación en 1964, tienen la entorchado social de “dar una segunda oportunidad a una persona que ha cometido un error y que es reinsertable”. Esta fue de las congregaciones que pidió el indulto de una presa y a la que le fue otorgado.
El sacerdote explica cómo es el procedimiento: “Nosotros solicitamos el indulto al centro penitenciario. Luego, la juntura de tratamiento estudia a otras personas que por su perfil merecen esa segunda oportunidad”. A esta cofradía no le interesan los delitos que haya cometido el infractor. “No miramos lo que ha pasado”, confiesa Urdiales. Por otra parte, una vez la persona está en la calle, le ayudan si lo necesita.
¿Qué pasa con la reincidencia?
La experiencia de esta congregación es positiva en cuanto a la reincidencia. “No tenemos conocimiento de que algún preso haya vuelto a delinquir”, dice el sacerdote. Y es que “tenemos contacto con la mayoría de ellos”.
Lo que sí es imprescindible para beneficiarse del privilegio es que haya reparación del daño causado, que puede darse, por ejemplo, en un caso de alzamiento de fondos. Este fue el delito que cometió uno de los presidiarios absueltos este 2024.
Han pasado ya 23 abriles desde que la cómico Sara Montiel cantara en Elche (Alicante) una saeta pidiendo la independencia de un recluso. “Que yo te pido que pongas en facilidad a este rehén. Que si Altísimo quiere, él va a hacer su vida frecuente, adecuado, con su mujer, sus hijos…”, recitaba la actriz. Desde ese 2001 hasta hoy, al salir la Semana Santa, los indultos y esa saeta se hacen virales.