Otra circunstancia que dificulta mucho los rescates Es la mala comunicación de algunas poblaciones.. Especialmente porque muchos edificios son adobea material Cuando se desprende, genera mucho polvo y no deja bolsas de aire, que entierran a las víctimas.
No han podido resistir los embates del terremoto. Son polvo, se han derrumbado. Es una carrera contra el reloj. Excavan a mano o con palas, es la única forma de encontrar supervivientes. La maquinaria de los bomberos, específica para construcciones de hormigón y acero, no se puede utilizar con adobe.
“Tenemos el problema de tener un enorme parque de viviendas que puede tener cientos de años de antigüedad y repararlo es técnicamente difícil y además muy caro”, explica Colin Taylor, profesor de ingeniería de la Universidad de Bristol.
Las consecuencias del terremotoDejaron muertos en una decena de provinciaspero los más afectados son Al Haouz, -al sur de Marrakech y cercano al epicentro-, con 1.604 fallecidos, seguido de Taroudant (976 víctimas mortales).
Intervención de la UEM
El equipo de rescate español del Unidad Militar de Emergencia (UME) ha comenzado a encontrar cadáveres en poblados de difícil acceso, según informó el comandante Enrique Bascuas Figueras, líder del equipo USAR de la UME.
Los equipos español, británico y qatarí están trabajando en las zonas de Asni y la comuna de Anougal, designadas para el rescate, y la ministra española de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha asegurado que permanecerán allí “el tiempo que sea necesario”.
Marruecos sólo acepta ayudas de España, Reino Unido, Qatar y Emiratos
Por el momento, Marruecos ha aceptado la ayuda de otros países como Reino Unido, Qatar y Emiratos Árabes Unidos.
Los ciudadanos marroquíes estan haciendo mucho tiempo colas para donar sangre en una acción sin precedentes en el país tras el terremoto; En dos días se han registrado 13.000 donaciones, cuando en condiciones normales suele haber cerca de mil donaciones diarias.
Las estrechas calles del barrio judío de Marrakech Están llenas de escombros y los residentes se ven obligados a dormir en las calles, incluidos algunos cuyas casas corren peligro de derrumbarse.