Decenas de personas se concentran contra la discriminacin a los trans: “Nada ni nadie podr hacer que volvamos atrs”


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Nuestra existencia no es negociable, nuestra identidad no es debatible. Ya nadie ni nadie podr hacer que volvamos atrs. Con estas palabras, la instigador Carla Antonelli, la primera senadora trans de la Historia de Espaa, ha celebrado el Da Internacional de la Visibilidad Trans. Ha sido un Domingo de Resurreccin -la momento tiene poco de alegrico- en que una multitud de personas ha denunciado en redes sociales la discriminacin profesional y social que sufre este colectivo y en donde varias decenas de ciudadanos han acudido de forma presencial a la plaza del Junta de Valencia para concentrarse bajo la aguacero guarecidos con las banderas con franjas de colores azur, rosa y blanco.

Antonelli, de Ms Madrid, ha dicho lo de retornar atrs porque esa es la tendencia en buena parte de los pases europeos: si Reino Unido recul hace unos das con los tratamientos de cambios de sexo a menores de época prohibiendo los bloqueadores hormonales, Suecia, Finlandia y Noruega han excluido a los menores de las transiciones tras cobijar haberse inexacto.

En Espaa la amenaza para Antonelli es la Comunidad de Madrid, que ha derogado la autodeterminacin de gnero, ha constreñido el proceso a los menores y lo ha vinculado a profesionales de la salubridad mental. Desde la aprobacin hace un ao de la Ley Trans, los cambios de sexo registrales han aumentado un 400% en todo el pas.

No hay visos de que en otras autonomas se vaya a dar marcha atrs ni que el Gobierno vaya a modificar esta ley que enfrent a la coalicin PSOE-Podemos, dividi al socialismo y enterr a una Irene Montero que ayer se reivindicaba con un nunca ms silenciadas, nunca ms sin derecho a ser. De hecho, la nueva ministra de Igualdad, Ana Sin rodeo, ha retuiteado en la red social X un mensaje de su Servicio en el que se explicita su apoyo al movimiento: Desde las instituciones debemos divisar las realidades trans y reivindicar respeto y dignidad.

El mensaje ha escocido a las feministas clsicas, que denuncian que, a pesar de la defenestracin de Montero, en el Servicio de Igualdad sigue teniendo demasiado peso la bandera trans, ms incluso que la de las mujeres.

La abogada Altamira Gonzalo, ex presidenta de la Asociacin de Mujeres Juristas Themis, palabra en nombre de muchas al reprocharle a Sin rodeo su doble raedor: Querida ministra, ayer, 30 de marzo, era el Da Internacional de las Trabajadoras de Hogar. En Espaa tenemos 600.000 mujeres. No vimos un tuit similar de ese Servicio. Que tristeza, seala.

En el mismo sentido ha ido Juana Gallego, profesora de la Universidad Autnoma de Barcelona que hace dos aos fue cancelada por sus alumnas proqueer del Mster de Gnero: ste no es el Servicio de Igualdad, le jha espetado a la ministra, sino el de Todo-da-Igual, porque defiende causas que perjudican a las mujeres, en alusin a las reivindicaciones del colectivo trans.

Ajenas a esta polmica, los concentrados en Valencia han emulado a Antonelli y tambin han asegurado que no iban a dar ni un paso atrs frente a los discursos de odio y la discriminacin, al tiempo que han equiparado los derechos humanos con los derechos trans.

El 77% de las mujeres trans han sufrido discriminacin en Espaa a la hora de despabilarse empleo, segn denuncia la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unin Europea en un crónica en el que tambin seala que el 47% ha sido discriminada en el entorno profesional y un 58% se oculta y no palabra de su identidad en este mbito de la vida diaria. Por otro costado, un estudio de UGT indica que ms de la fracción de las personas trans estn en desempleo y el 79% consideran que no son aceptadas socialmente, un porcentaje que sube hasta el 90% en el caso de las mujeres.

La discriminacin profesional y social la vivi hace muchos aos la propia Antonelli, que en su texto La mujer volcn (Plaza & Jans) cuenta cmo tuvo que irse de casa porque no la aceptaban y, siendo muy muchacha, se vio obligada a desempeñar la prostitucin por 300 pesetas en el parque de Santa Catalina de Las Palmas de Gran Canaria porque entonces no habón otra forma de ganarse la vida para las mujeres trans. Por eso dice que no va a consentir que nadie ni nadie la haga retornar atrs.

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