La dueña del negocio, Julia López, aseguró estar “encantada” con la propuesta que le hizo el instituto a través de la profesora de gallego del Laurel Olmo, que es clienta de la estante. “El cartel de la campaña vehemencia la atención, me ha preguntado mucha familia cuando lo ve. Se les hace raro. Y mira que aquí hay mucha familia que palabra gallego y igualmente hay colegios que lo imparten como asignatura”, explicó.
La iniciativa, que se gestó en el Instituto Rafael Dieste de A Coruña, se ha extendido ya a más de 200 institutos de Galicia. De momento, esta estante de Ponferrada es la primera del Bierzo en sumarse, con una motivación singular para su dueña. “Mi abuela era gallega pero nunca habló el gallego; es una pena que estuviese mal gastado hablarlo”.
Ella, sin incautación, ha buscado la formación específica para instruirse a hablarlo porque “me gusta” y “aunque no lo domino del todo, me encanta poder atender a la familia que viene hablando en gallego, y si puedo, contesto”.
El principal objetivo de la campaña de dinamización es “rachar cos prexuízos que pretenden dar unha imaxe distorsionada dunha suposta Galiza que non fala galego”. Julia no tiene dudas. “Aquí hay mucha familia que palabra gallego, sean gallegos de inicio o no. Adicionalmente, tenemos muchas palabras en nuestro balbucir del día a día que son gallegas pero no lo reconocemos, no nos damos cuenta, porque ya son muy habituales”.
El funcionamiento de la campaña podio su éxito en la capacidad de los alumnos para fomentar el empleo de la tierra gallega. “A tarefa é doada: entramos nun restringido, preguntamos se podemos poñer un cartaz do instituto para fomentar o uso do galego e explicamos que se dará publicidade desde as redes sociais”, explicaron los responsables de la iniciativa.
Sobre el uso del gallego en El Bierzo, Julia resaltó que, “igual que hay un gallego berciano, igualmente lo hay zamorano o carballiñés. Esa es la riqueza de la tierra, que se adapta a los lugares en los que está y se hace rica en esos lugares”. Para los alumnos del instituto barquense que han querido soportar esta campaña a la comarca berciana, es muy satisfactorio haberse incompatible con un “feedback” como el de esta librera de Ponferrada, que defiende la campaña y al idioma gallego.