Cae una banda de traficantes que usaba a una octogenaria para disimular los transportes de droga


La última operación contra el narcotráfico en Zaragoza llevada a cabo por la UDYCO (Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado) se ha saldado con la incautación de 73 kilogramos de droga -30 de cocaína y 43 de hachís- y 51.000 euros y la detención de 16 personas como presuntos autores de delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.

Entre los detenidos se encuentra una mujer de 82 años, madre del transportista que ayudó a los agentes a descubrir la trama, que viajaba como copiloto con su hijo por toda la geografía nacional e internacional con el objetivo de no levantar sospechas en los distintos controles policiales y aduaneros. que estaban de paso.

El tráfico de drogas

Madre e hijo podrían recorrer hasta 2.000 kilómetros en sólo 24 horas

Según ha explicado hoy la Policía Nacional, se trata de una operación desarrollada en tres fases en las comunidades autónomas de Aragón, Navarra y La Rioja. La investigación se inició en febrero pasado cuando se detectó a un individuo que actuaba como transportista de distintas organizaciones narcotraficantes en territorio nacional y en el exterior.

Durante sus viajes, el sospechoso se dedicaba a transportar hachís y marihuana desde España a otros países europeos, mientras que a su regreso regresaba cargado, principalmente desde Países Bajos, con distintos precursores de derivados anfetamínicos que luego descargaba en la localidad navarra de Tudela. Asimismo, también transportó todo tipo de sustancias estupefacientes y psicotrópicas por todo el territorio nacional.


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Los investigadores comprobaron que el sospechoso utilizaba a su madre, de 82 años, como copiloto para realizar estos viajes, que en ocasiones podían cubrir hasta 2.000 kilómetros en apenas 24 horas. Durante estos viajes utilizó varios vehículos que cambiaba frecuentemente y llevaba una silla de ruedas y un dispositivo de oxígeno. Esta forma de actuar hizo que el vehículo no despertara sospechas en los distintos controles policiales y aduaneros con los que se cruzaron.

A medida que avanzaba la investigación lograron identificar a dos personas que frecuentaban un taller de Tudela y que se dedicaban a importar precursores de derivados de anfetaminas para posteriormente convertirlos en velocidad (sulfato de anfetamina) y MDMA (cristal) en un laboratorio que tenían ubicado en una casa rústica.

Finalmente, la investigación les llevó hasta Logroño, donde el investigador principal, acompañado de otras personas, estableció diversos contactos durante varios días con dos hombres. Estas personas resultaron ser el líder de una importante organización de narcotráfico con base en La Rioja y su lugarteniente, ambos conocidos por los agentes por investigaciones previas.

El tráfico de drogas

Cuando viajaba, el sospechoso utilizaba varios vehículos y llevaba una silla de ruedas y un dispositivo de oxígeno para su madre.

Con todos estos datos, la primera fase operativa tuvo lugar el pasado 3 de agosto a la llegada del sospechoso a Zaragoza a su regreso de un viaje a la localidad riojana de Villamediana de Iregua. En ese momento, los agentes localizaron en su vehículo un fardo de hachís de 22 kilogramos escondido en los pañales de la madre, por lo que fue detenido.

Este día se llevaron a cabo otros dos registros domiciliarios en Zaragoza, donde se incautaron de más sustancias estupefacientes, dinero y efectos relacionados con el tráfico de drogas. También fueron detenidos otros cinco presuntos integrantes de la banda, además de su madre, quien fue puesta en libertad por su estado de salud mientras que el resto de ella fue a prisión.


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La segunda fase de la operación, el 17 de agosto, tuvo lugar en la localidad de Tudela, donde fueron detenidas cuatro personas, dos de las cuales fueron encarceladas tras ser puestas a disposición judicial, y donde se encontró un laboratorio en el que intervinieron. gran cantidad de productos químicos, precursores y herramientas necesarias para la producción de MDMA y sulfato de anfetamina.

La operación culminó el pasado 31 de agosto en La Rioja, con el registro de tres domicilios en Logroño, Alberite y Villamediana de Iregua, localidad esta última donde se ocultaron 28 kilos de cocaína y 21 kilos de hachís, entre otros efectos relacionados con el tráfico de drogas. narcóticos, y otras cinco personas fueron arrestadas y también llevadas a prisión.

Se trata de la segunda gran intervención de cocaína que realiza la UDYCO de la Brigada de Policía Judicial de Zaragoza en 2023 tras la llevada a cabo en marzo cuando se incautaron otros 22 kilogramos en la Operación Sansón.

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