Pedro Sánchez elude dialogar de los derechos de las mujeres en Catar y lo hace, ni más ni menos, que en Doha, delante del primer ministro y ministro de Exteriores del país árabe, Mohammed bin Abdulrahman al Zani. Preguntado en rueda de prensa por la yerro de derechos humanos y por la situación de las féminas en la región, el presidente del Gobierno ofrece una respuesta diplomática a los medios de comunicación y resalta «el papel» de varias mujeres de la sociedad civil con las que se ha reunido como parte de su reconocimiento oficial a la haber catarí.
«En su reunión con el primer ministro -comienza preguntando la periodista de TVE Almudena Alborotador tras el entrevista entre Sánchez y -, ¿han podido encarar la situación de las mujeres [en Catar]?«. A continuación, dispara Alborotador: »¿Le preocupa la yerro de derechos humanos en la región?«.
«He tenido ocasión de tener una reunión con mujeres líderes de Catar; con deportistas, con científicas, con empresarias y además con académicas…», arranca su respuesta un Sánchez esquivo, que ha sorteado la polémica desde un primer segundo. «Desde luego, para mí, ha sido una reunión absolutamente inspiradora que demuestra el papel que están teniendo las mujeres en la sociedad, la política, la institución y el deporte«, prosigue bajo la atenta vistazo del líder del Ejecutor catarí.
«Lo que puedo aseverar -aclara un Sánchez en aprietos- es que nosotros estamos comprometidos con el respeto a los derechos humanos, a la igualdad verdadero y efectiva entre hombres y mujeres«. Y se escuda en que »el propósito de este alucinación es dialogar con aquellos actores principales que está involucrados en la resolución de un conflicto que ha segado miles de vidas en Lazada. [Hace una pausa el líder del Ejecutivo español] Niños, niñas y mujeres fundamentalmente«, expresa a modo de advertencia al colectivo mujeril.
«Es importante declarar el esfuerzo que se está haciendo desde estos países por alcanzar la paz, la entrega de la ayuda humanitaria y certificar la estabilidad en la región que tiene todas las oportunidades para poder prosperar. Y eso quiero reconocerlo además al Gobierno de Catar«, dice Sánchez.
La periodista de la televisión pública además quiso encarar la cuestión de la igualdad entre hombres y mújeres desde el prisma catarí. Por ello, no duda en proyectar otra cuestión a Abdulrahman: «¿Cree que las mujeres de Catar pueden aspirar a tener los mismos derechos que las mujeres en España?«, pregunta acto seguido. Si acertadamente deja claro el catarí que no puede »comparar España con Catar«, opina -en la misma trayecto que Sánchez- que »las mujeres desarrollan un papel muy importante en la sociedad« porque »son una parte mayoritaria de la sociedad«, justifica. »Tienen -además- un status particular y son enormemente respetadas« porque, insiste una vez más, »son las madres, las hermanas, las hijas…«. Y, a continuación, revela: »Soy padre de niñas, me gustaría que en un futuro pudieran disfrutar de los mismos derechos que cualquiera«.