Hace más de un año que la Plataforma ‘Toledo, Sociedad, Patrimonio y Civilización’ solicitó a la Consejería de Educación, Civilización y Deporte de la Concilio de Comunidades de Castilla-La Mancha culminar el proceso de explicación de los Baños Árabes-Tenerías como Proporcionadamente de Interés Cultural al amparo de la Ley 4/2013, de Patrimonio Cultural de Castilla La Mancha, y del artículo 54 de Ley 39/2015 del Procedimiento Chupatintas Popular de las Administraciones Públicas. Aquella primera solicitud se formulaba en presencia de los riesgos de construcción de viviendas sobre los restos de las Tenerías y en contacto con los Baños Árabes y parte de la muralla visigoda declarada monumento doméstico por el Estado (BOE 25/12/1921). La construcción de viviendas sobre las Tenerías supondrá la desaparición de los únicos vestigios de la función industrial de Toledo durante siglos y sobre todo en el XVI. Se pedía a la Consejería de Civilización que culminara el proceso iniciado por ella misma en 2008 para determinar BIC ese conjunto monumental, con un expediente original en el D.O.C.M y en el B.O.E, y dejado en el olvido, a pesar de la relevancia de los haberes merecedores de protección permitido.
Luego de presentar alegaciones en presencia de el Junta por el tesina de construcción de viviendas en Tenerías y en presencia de la equivocación de respuesta de la Consejería, la Plataforma ‘Toledo, Sociedad, Patrimonio y Civilización’ volvió a dirigirse dos veces más a esa Consejería solicitando la culminación del proceso de explicación como BIC de los Baños Árabes y las Tenerías. Al interés de aquellos restos arqueológicos y al peligro de su destrucción y desaparición, se añadía la coincidencia en el mismo espacio de las clepsidras de Azarquiel, según el arqueólogo Julián García Sánchez de Pedro. En presencia de la persistente indiferencia del gobierno regional a la batalla ciudadana, a esta no le queda otra vía que la «denuncia por expolio» al Ocupación de Civilización, como mayor avalista de los haberes patrimoniales del Estado, conforme al artículo cuarto de la Ley de Patrimonio Histórico Gachupin de 1985. Es una figura permitido ya utilizada por esta plataforma en la Vega Devaluación, con el éxito conocido que ha permitido liberar esa zona de la construcción de viviendas contempladas en ella por la Modificación Puntual 28 del PGMOU de 1986 y el traslado del proyectado nuevo cuartel de la Agente Civil a una sitio expedito de servidumbres patrimoniales y medioambientales.
No obstante, a más de un año sin respuesta de la Consejería de Civilización, se ha producido un nuevo hecho que debería defender la aprobación de la reclamada explicación de modo inmediata. Se manejo del emanación de Toledo por su corregidor a la carrera para su designación como Caudal Europea de la Civilización en 2031, lo que situaría a nuestra ciudad en el nivel de protagonismo cultural que le corresponde por su historia, títulos patrimoniales y medioambientales. La Caudal Europea de la Civilización es un título que el Parlamento Europeo, el Consejo de Ministros y la Comisión Europea otorgan anualmente a ciudades europeas y que les permite modernizar sus estructuras y acometer un tesina de ampliación sostenido a partir de la civilización, con la implicación de la ciudadanía y de todos los actores políticos, económicos y sociales de la ciudad.
La carrera por la Capitalidad Europa de la Civilización supone la billete ciudadana en un tesina que exige compromiso de las instituciones, de personas del ocupación y de fuera del mismo, con competencias y registro probados en los diferentes ámbitos de la civilización, además de renombre y proyección internacional. Y desde luego, es imprescindible el liderazgo político: el Junta, los alcaldes de los municipios de la aglomeración candidata, la Diputación, el Gobierno y el Parlamento regionales, lo ya gastado en todas las ciudades que han obtenido esta calificación. Sin esa estrecha colaboración entre los actores de la ciudad y sin la tensión emocional que supone la elaboración previa de un software participativo de civilización y de un tesina ilusionante de ciudad, la carrera estaría perdida desde sus orígenes. En el caso de Toledo, la entrada en la competición empieza tarde, puesto que debería activo comenzado antiguamente, en 2021, con la antedicho corporación municipal, como lo han hecho Burgos y Explosivo, dada la complejidad del tesina, pero aun así, nuestra ciudad reúne méritos para competir con éxito por la Capitalidad Europea de la Civilización en 2031 frente a las otras 5 ciudades españolas que además han anunciado su candidatura.
El pistoletazo de salida está legado, solo equivocación el software de consenso, de billete e ilusión de la sociedad civil, que ya debería de existir y estar trazado, al menos como esbozo, con objetivos acordes con las directrices culturales de la Unión Europea, con unos ejes argumentales capaces de mostrar la conexión entre el tesina y una organización de ampliación a prolongado plazo. Hace equivocación un contenido cultural y primoroso perfectamente construido, con proyección internacional a partir de lo ya existente en todas las manifestaciones de la civilización internamente del ámbito tópico, y en todo caso, es poco mucho más fabricado que los eventos conmemorativos que tanto han gustado siempre en Toledo. Ahora, hace equivocación un tesina creativo e renovador, tópico y europeo, que implique al conjunto de los ciudadanos y especialmente a los más jóvenes, que avance en sentimientos de identidad europea y que disponga de capacidad financiera, de apoyo institucional y de liderazgo de administración. Igualmente se requiere capacidad de acogida e infraestructuras culturales, pero con un software de turismo responsable, ponderado e integral, que hoy es inexistente, y que ha de contar con la complicidad de los residentes.
Ahora perfectamente, la puesta en marcha del necesario tesina de ciudad en torno a la civilización y el patrimonio, con el medioambiente, la naturaleza y el río como soportes principales, exige la implicación en el mismo de todos los niveles de la compañía, apoyo a programas, a acciones culturales y a proyectos de pulvínulo como punto de partida, algunos en marcha y de proyección internacional. Y como no podría ser de otro modo, este tesina exige efectividad en la conservación y puesta en valía del patrimonio tópico, que además es europeo, lo que pasa por resolver tareas pendientes como la explicación de los Baños Árabes y Tenerías como BIC. Lógicamente, esa batalla no debería esperar más y tendría que completarse con la recuperación de un patrimonio dormido como contribución a la civilización popular europea. En esa situación, están, entre otros, la puerta del Paso y los restos del anfiteatro romano. Y desde luego, todo eso sin olvidar la atención al paisaje, al medioambiente y al Tajo, que además son civilización europea, lo que exige impedir proyectos constructivos en ámbitos de protección y de valía ambiental, como la edificación de un hotel adyacente al puente de la Cava o de barrios nuevos, como el de Palacio, que se aproximan a las orillas del río, invaden parcialmente conos de protección visual y acentúan la dispersión urbana.
Cuarenta primaveras a posteriori de la existencia del software de la capitalidad europea y de que más de 60 ciudades hayan corto este título, entre ellas Madrid, Santiago de Compostela, Salamanca y San Sebastián, la experiencia demuestra que las localidades con más oportunidades son las que han demostrado anciano capacidad para poner en valía su patrimonio e impulsar proyectos culturales sostenibles y participativos; las recientes ciudades seleccionadas para renta cultural en 2028: Bourges en Francia, České Budějovice en la República Checa y Skopje en Macedonia del Finalidad, son buenos ejemplos. A partir de esos hechos, es además ligera comprobar cómo los proyectos de capitalidad europea han supuesto siempre avances para consolidar ecosistemas culturales y sociales, pasar desafíos y difundir ilusiones, incluso para las ciudades que no han sido seleccionadas por el grupo internacional encargado de la audacia.
Toledo, se enfrenta, pues, a una oportunidad única para catalizar inteligencias, ideas, propuestas y bienes locales, para regenerar espacios y coordinarlos con su aglomeración, siempre como escazes de futuro, y ahora, como tesina inmediato para aspirar al éxito en su selección como renta de la civilización. Todo eso ha de hacerse demostrando que Toledo ha sido siempre una ciudad de disposición europea y que sus aportaciones han contribuido a construir la civilización de Europa. La billete en la competición ha de ser una muestra de compromiso de todos los toledanos y de colaboración de las diferentes administraciones por una Europa más unida y más solidaria, y por una ciudad innovadora, más equilibrada, cohesionada y reconocida internacionalmente. En este contexto, la explicación como BIC de los Baños Árabes y de las Tenerías sería una primera prueba del gobierno regional de apoyo a la candidatura de Toledo y de su firme compromiso con la conservación y puesta en valía de bienes culturales que lo son de España, de Europa y del Mundo.