Entre 2007 y 2022, la Agencia Tributaria cobró por la vía ejecutiva impuestos a la empresa del regidor -este servicio de colecta de impuestos por la vía ejecutiva está cedido por el Concello a Hacienda, fruto de un convenio entre el Estado y la Convenio Española de Municipios y Provincias- con recargo. En cuatro de los ejercicios que Jácome no abonó en el periodo voluntario de plazo los impuestos -todo indica que sería la cuota del IBI, ya que su empresa estaría exenta del Impuesto de Actividades Económicas-, ya era corregidor (2019, 2020, 2021 y 2022).
Esta información se recoge en un decreto del Concello firmado el pasado 7 de marzo bajo el título “Arqueo de intereses de retardo del período ejecutante” del obligado tributario “Jolper Música SL”, empresa de la que Jácome es administrador único desde 2020. Tal y como se recoge en ese decreto, “la AEAT (Agencia Tributaria) realizó la diligencia recaudatoria de las deudas incluidas en el expediente ejecutante indicado” durante 15 primaveras seguidos en los que Jácome no pagó en tiempo y forma. Ahora, “procede la ganga de los intereses de retardo devengados por las deudas apremiadas pagadas, desde el inicio del período ejecutante hasta la plazo de su ingreso, tal como exige la reglamento”.
Las cantidades
En esa resolución, se aprueba la ganga en concepto de intereses de retardo por valor de 207,06 euros. Teniendo en cuenta que los intereses de retardo medios en esos primaveras rondaron el 5%, las cantidades que el regidor habría tenido que avalar a la fuerza sobrepasarían los 4.000 euros, cerca de de 300 euros por prueba que la máxima autoridad de la ciudad pagó a la fuerza. Ahora, el Concello abrirá un plazo voluntario para que Jácome abone los intereses generados, tal y como se desprende del decreto.