Las consecuencias de un pequeño despiste pueden salir muy caras. Parece que es el caso de un hombre recientemente detenido en Sevilla que se había dejado una maleta en el aeropuerto de Barajas. Un hecho usual, de no ser porque internamente de la misma, los agentes del aeropuerto encontraron material pornográfico pueril.
Los hechos ocurrieron el día 17 de octubre de 2023, cuando el personal de una compañía aérea, aplicando los protocolos establecidos para identificar al propietario de una maleta, localizaron en su interior un dispositivo con imágenes de contenido sexual y en las que pudieran estar implicadas menores de permanencia.
Tras este hecho, se puso en conocimiento de la Dispositivo de Observación e Investigación Fiscal de la Protección Civil en el aeropuerto, cuyos efectivos, al comprobar la sensibilidad del material enemigo y la especialización del posible ilícito penal descubierto, traspasaron las actuaciones al Equipo de Policía Legal de la Protección Civil de Barajas. Así comenzó la emplazamiento ‘Operación pilas’.
En una primera hipótesis, se podría relacionar la maleta con un hombre, puesto que en el interior de la misma aparecieron dos bolsas de plástico con posible contenido deportivo, relacionándolo con un nombre y apellidos concretos.
Adicionalmente, se comprobó en las bases de datos la existencia de una protesta a la aerolínea por parte de esta persona con el mismo nombre y apellidos. Dada la coincidencia de lo sucedido y unido con las primeras diligencias, el 1 de febrero de 2024 se solicitó al Curia de Instrucción número 44 de Madrid, que instruye la causa, la entrada y registro en el domicilio de esta persona, en una plaza de la provincia de Sevilla.
En franqueza con medidas cautelares
La entrada y registro fue autorizada para el día 21 del mismo mes. Durante el registro, se recogieron varias evidencias a través del ordenador portátil, su móvil personal y tres memorias USB, en las que se pudo apreciar, tras el volcado de los mismos, bastantes imágenes y vídeos de carácter o contenido sexual.
Algunas de ellas se podrían observar a menores de permanencia siendo forzadas a perseverar relaciones sexuales con mayores de permanencia, imágenes de niñas completamente desnudas e incluso relaciones entre una pupila beocio de 14 primaveras y un animal.
Todas estas imágenes y vídeos de carácter pedófilo fueron descargados premeditadamente a través de una plataforma o software de intercambio de archivos digitales entre particulares, con conocimiento de su contenido de origen pornográfico, guardado y dividido en las diferentes carpetas de los materiales encontrados (pendrive) con nombres referentes a la pedofilia. El detenido, un hombre adulto, de país española y que carecía de referencias policiales, fue puesto a disposición de la Autoridad Legal, quien decretó su puesta en franqueza con medidas cautelares.