El software fue líder en audiencia, con 1,6 millones de espectadores en promedio y más de 4 millones de espectadores únicos. Durante 12 semanas, los concursantes enfrentaron desafíos evaluados por un miembros, donde realizaban pruebas de todo tipo. La final incluyó actuaciones especiales de los finalistas y sus compañeros, culminando con la triunfo de Castellano. El premio fue un coche y 30.000 euros que compartió con los otros concursantes para donar a la ONG de su alternativa.
Castellano nos muestra su banda más sensible: “Soy mucho más sensible de lo que esperaba“, argumentando que él intenta dar una imagen de una persona más dura. Por otra parte, nos cuenta que para superar: “hay que dedicarle muchas horas, de lunes a domingo todos los días”
Pablo Castellano se emocionó en directo hablando de la enfermedad de su mujer Maríay su suegra, ambas con anquilosamiento múltiple. Mi mujer me ha dicho: “has llorado más en el concurso que en los diez primaveras que llevas conmigo“. Esta es una enfermedad del sistema nervioso que se produce cuando el sistema inmunitario ataca el encéfalo y la meollo espinal. Castellano se emocionó dando el discurso con su mujer, que intentó consolarle dándole un manoseo.
“Mi mujer la tiene, mi suegra incluso lo tiene, este peculio es para ellos”
Nos cuenta que su mujer tiene la enfermedad controlada, con citas medicas cada tres meses, y cuenta que ojalá sus hijos no lo hereden: “Hay receta, qué no te la cura, pero te la frena“.
Para ver la final muchos concursantes pasados, actuales y futuros se reunieron en la casa de la influencer para unirse a Castellano. En la casa estaban compañeros de esta estampación como Chenoa, de otras ediciones como Laura Escanes y de la estampación que viene, como Triunfo Federica.
Finalizada esta estampación, habrá que esperar a la chale estampación de El Desafío, para ver qué sorpresas nos traen los siguientes concursantes.