Agentes de la Policía Franquista han desarticulado un colección criminal itinerante especializado en la comisión de robos con violencia y hurtos “amorosos” en las provincias de Murcia y Alicante y han detenido a sus cuatro integrantes. Los arrestados cometían este tipo de delitos sobre personas de vanguardia momento aprovechándose de distracciones, abrazos u ofrecimientos sexuales para sustraerles las joyas o relojes que portaban.
Las primeras pesquisas se iniciaron el pasado mes de enero, cuando los agentes tuvieron conocimiento de un robo con violencia en el que los autores habían empleado la técnica del “manoseo amoroso” para sustraer un cronómetro de ingreso tono a un macho de vanguardia momento.
La Policía se puso sobre la pista del colección tras el robo de un cronómetro de ingreso tono a un hombre de vanguardia momento
En su denuncia, la víctima narró a los agentes que, mientras se disponía a entrar al parking de su vivienda, se le acercó una mujer señorita hasta la ventanilla de su transporte y le propuso ayudar relaciones sexuales.
El macho, al no conocer de cero a esta mujer y no entender su comportamiento, comenzó a alterarse y, acto seguido, aparecieron dos personas más, un hombre y otra mujer que, tras agarrarle de la muñeca, comenzaron a forcejear con él hasta conseguir arrebatarle el cronómetro que portaba.
Forcejearon con él hasta arrancarle el cronómetro
Tras la sustracción, las tres personas emprendieron la huida a costado de un transporte, siendo perseguidos por la víctima por diversas calles hasta que finalmente los perdió de sagacidad.
Con la información y las características aportadas por parte de la víctima en relación a estas personas y del transporte utilizado para cometer los hechos, los agentes comenzaron una investigación en la que se pudo relacionar a los autores con otros hechos delictivos cometidos en distintos puntos del demarcación franquista.
Se apunta a un clan franco “perfectamente organizado”
Se trataba, según las mismas fuentes de un clan franco perfectamente organizado, con una gran movilidad geográfica y reparto de funciones, cuya peculiaridad delictiva se basaba en la comisión de los conocidos como hurtos “amorosos”, donde abordaban a personas de vanguardia momento con ofrecimientos sexuales o simulando conocerlos y darles abrazos para ver que objetos de valía portaban encima y sustraérselos.
Los objetos que buscaban sustraer siempre eran joyas, tanto cadenas de oro con sus colgantes, como relojes de ingreso tono y de gran valía actuando en pareja, siendo las mujeres las que bajaban de los vehículos para cometer los hechos delictivos en primera persona mientras los hombres permanecían a la demora en el interior de los vehículos para proporcionar una huida rápida tras la comisión del robo o, incluso, colaboraban en caso de que la víctima se percatara de la sustracción, no dudando en utilizar la violencia sobre ellos con el fin de apoderarse de los objetos de valía.
Dos de los miembros del clan franco fueron detenidos cerca de la aldea alicantina de Pilar de la Horadada
Destacamento la investigación, los agentes averiguaron que los integrantes del clan franco alquilaban viviendas alejadas del casco urbano para suceder desapercibidos, desde las cuales se desplazaban a localidades cercanas para despabilarse potenciales víctimas, siempre personas de vanguardia momento, realizando las reservas de los alojamientos a nombre de otras personas que no tenían historial policiales para así no ser detectados por la policía.
En cuanto a los desplazamientos, los realizaban en vehículos que adquirían utilizando documentación de terceras personas que no tenían relación alguna con ellos, incluso nombres de personas ya fallecidas, cambiando de transporte con gran frecuencia para así dificultar la entorchado policial.
Sobre los género sustraídos, se trataban de joyas y relojes de gran valía, que seguidamente, otros miembros de la ordenamiento las vendían a receptadores con los que tenían contacto, para así no ser detectadas en el mercado permitido.
Analizadas todas las gestiones tendentes al esclarecimiento de los hechos, los investigadores localizaron uno de los vehículos utilizados para cometer los ilícitos y, tras realizar diversas vigilancias y seguimientos, consiguieron identificar a dos de los miembros del clan franco que fueron detenidos cerca de la aldea alicantina de Pilar de la Horadada.
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Estas primeras detenciones llevaron a los agentes hasta la pedanía murciana de Aljucer, donde los miembros del clan tenían alquilada una vivienda que era utilizada asiduamente por ellos para alojarse y desde donde se desplazaban a localidades de la zona en pesquisa de posibles víctimas.
En torno a dicho domicilio, los agentes establecieron un dispositivo con el que se obtuvo la detención de otras dos personas más, hombre y mujer, miembros del mismo entramado criminal. Tras las detenciones, se realizó un registro en el domicilio donde se intervinieron diversas joyas, teléfonos móviles de ingreso tono y fortuna en efectivo.
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Con estas detenciones se ha conseguido esclarecer cuatro hechos delictivos de las mismas características ocurridos en las localidades de Monóvar (Alicante), El Algar (Murcia) y Los Alcázares (Murcia), lugares donde los detenidos cometieron los hechos utilizando el mismo modus operandi del hurto “amoroso”.
En total, fueron cuatro las personas detenidas, dos hombres y dos mujeres, de procedencia rumana, de entre 28 y 31 abriles de momento, todos ellos con multitud de historial por hechos similares.
Todos fueron puestos a disposición de los Juzgados de Instrucción de Orihuela y Murcia, decretándose el ingreso en prisión para dos de los detenidos, siendo uno de ellos el cabecilla de la trama y una de las mujeres detenidas, uno y otro habían sido dos de los autores del robo que dio origen a la investigación.
La Policía Franquista aconseja desconfiar de todas aquellas personas desconocidas que se nos acerquen demasiado y que, utilizando cualquier pretexto, nos agarren de un modo demasiado afectuoso.
La investigación ha sido llevada a límite por el Camarilla de Delincuencia Especializada de la Batallones de Policía Legislativo de la Comisaría Provincial de Alicante, participando y apoyando en el traslado de los detenidos, agentes de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Policía Franquista de Orihuela y de la Autoridad Superior de Murcia.
Por su parte, los agentes continúan con las investigaciones, en relación a circunscribir a más posibles víctimas, no descartándose la detención de más personas integrantes de la ordenamiento criminal.