Este jueves, uno de los eventos más multitudinarios del septentrión peninsular abre sus puertas en Santiago. El festival Son do Camiño inaugurará el calendario musical de este verano con un cartel plagado de grandes artistas internacionales y, con él, la temporada entrada para el turismo en Galicia. El martes, el director de la Axencia de Turismo y conselleiro del ramo, Xosé Merelles, ha presentado desde el Monte do Alegría, en la renta gallega, un cómputo del «sensación tractor» que genera; y ha valorado que la existencia de un entramado de festivales en la Comunidad contribuye a «consolidar» su software de ocio veraniego.
Merelles ha hablado del festival como una «aventura» que desde hace cinco primaveras «se repite con mucho éxito en un entorno –Monte do Alegría– muy valorable» y ha celebrado su trayectoria: «Cuando la Xunta apostó por un festival impulsado por gallegos –desde instituciones hasta productoras y patrocinadores– no sabíamos cómo resultaría, pero, desde la primera estampación, el resultado es espectacular«. Y ha acostado mano de un estudio de la USC y Agadic para inferir esa tendencia al resto de festivales que se celebran cada año en la Comunidad; según sus datos, el impacto turístico de estos eventos en la industria musical gallega es de más de 227 millones de euros y 3.250 empleos.
En esa diámetro, ha reivindicado la «alianza estratégica» que mantienen en Galicia el sector musical y el turismo, destacando el Son do Camiño por su «capacidad de crecimiento y de crecimiento» y el «impulso tractor» que ejerce. Ha valorado que, a día de hoy, «siete u ocho festivales grandes» permiten que la programación festiva se prolongue no solo durante el verano, sino igualmente los meses anteriores –como es el caso– y los posteriores, lo que genera una «proposición turística consolidada». «Galicia se esté consolidando como sede de grandes espectáculos», resumió, y esto «repercute directamente» y de modo positiva «en hoteles, restaurantes, pero igualmente en transporte y distintos servicios». Este año, el conselleiro ha oculto el presupuesto dedicado al festival en 8 millones, con una participación de la Xunta de 2,9, «prácticamente lo mismo» que se había destinado en ediciones anteriores.
Igualmente Kin Martínez, de EsmerArte, uno de los organizadores del festival, ha tomado la palabra durante la presentación y ha puesto en valencia lo «asequible» y «competitivo» del festival pese a su crecimiento como certamen. «Cada año optimizamos más. Aunque los costes de producción subieron un 35%, en vez de subir el precio de los abonos reducimos la diferencia con las aportaciones» de la Xunta y los patrocinadores, ha explicado: «No se tráfico solo de una logística de marketing, sino de hacer un festival lo más campechano posible». En ese sentido, ha situado al Son en el «top 10» de festivales españoles en cuanto a número de sabido y ha destacado que «en una mañana llegaron a venderse 30.000 abonos», poco «increíble» y que «no sucede» en el caso de otros eventos de su talla.
Tirada con novedades
Este año el festival llega con novedades, y de presentarlas se ha encargado Iván Méndez, de Bring the Noise, otra de las empresas promotoras. Por un banda, se habilitará un nuevo círculo dedicado a la música electrónica, Son Electro, con su propia selección de artistas dedicada. Y, por primer año, el festival emitirá retransmisiones en directo de algunos de sus conciertos a través de TVE y YouTube. Según adelantó, el concierto de The Pet Shop Boys podrá encontrarse en el Canal 24 horas de Televisión Española, mientras que el de Arde Bogotá, Marilia Monzón y Baiuca podrá seguirse a través del canal de YouTube del festival.