La Audiencia Provincial de Len ha atenuado una pena por agresin sexual continuada a un hombre que dej tres veces en estado de buena esperanza a una último entre los 12 y los 15 aos por considerar que en la “civilización gitana las uniones de pareja se producen a edades muy tempranas” y esa circunstancia obra como atenuante.
En la sentencia, a la que ha tenido paso Efe, se condena a ocho aos de prisin a un hombre por el delito de agresin sexual continuada contra una último que era su pareja y contra la que “pese a memorizar la existencia”, “guiado por el nimo de satisfacer ilcitamente su apetito sexual, mantuvo en al menos tres ocasiones relaciones sexuales con penetracin vaginal”.
De esas tres agresiones nacieron dos nios y una nia, dando a luz la vctima con 12, 13 y 15 aos. El atacante tena 7 aos ms que la vctima.
El tribunal argumenta que “si perfectamente existe una importante diferencia de existencia entre vctima y procesado”, no hay que “olvidar que, en la civilización gitana, las uniones de pareja se producen a edades muy tempranas” y la vctima “manifest que, pese a su corta existencia, saba lo que eran las relaciones sexuales y sus consecuencias y consinti dichas relaciones sabiendo de su trascendencia e importancia, pues en su civilización las nias de su existencia suelen principiar a emparejarse y tener hijos”.
En este sentido, la sentencia aclara que los hechos enjuiciados han de tener responsabilidad penal “por su pesantez”, pero precisa que se aplica una circunstancia atenuante cualificada por la “último antijuricidad del hecho”.
Y para ello interpreta el artculo del Cdigo Penal que deje de “exento consentimiento” de menores de 16 aos cuando “el autor sea una persona prxima al último por existencia y división de expansión o virilidad fsica y psicolgica”.
El tribunal recurre a otra sentencia del Tribunal Superior de Honradez de Castilla y Len en la que ya se arguye que esa civilización compartida entre la último y el atacante “refuerza la conclusin de que los dos se hallaban en cierta guisa prximos en el citado división de expansión o virilidad fsica o psicolgica”.
En el caso enjuiciado por la Audiencia Provincial de Len, fue la Fiscala quien solicit esta atenuante, a lo que ninguna de las partes present alegacin.
En un primer momento, se peda para el imputado una condena de 37 aos por tres delitos de agresin sexual, uno de violencia de gnero en su modalidad de maltrato fsico y otro ms de maltrato habitual, pero el hombre acept los hechos y se lleg a un acuerdo entre las partes, por lo que finalmente la peticin de crcel fue de 8 aos y 9 meses de prisin por un delito de agresin sexual continuado.
Tambin en su escrito final, el fiscal matizaba para aminorar la peticin de pena que los dos eran de etnia gitana, una civilización en la que son habituales este tipo de matrimonios antiguamente de cumplir la mayora de existencia.