Con el verano a la dorso de la ángulo y pendientes del Consejo Interterritorial del Sistema Doméstico de Vigor que finalmente se celebrará el próximo 5 de junio, Galicia bosqueja ya las líneas maestras de su plan veraniego. Algunas de ellas las adelantó ayer el conselleiro del ramo, Antonio Gómez Caamaño, que pretende atenuar la desaparición de facultativos en los meses de verano tirando de médicos internos residentes (MIR) de postrero año y de la figura del ‘médico itinerante’.
La primera de las soluciones que la Comunidad pondrá sobre la mesa en su acercamiento con el Profesión conecta con uno de los problema derivados de la pandemia. A causa del virus, ningún MIR de atención primaria ha terminado su formación, porque ésta retrasó su inicio hasta septiembre. Una eventualidad que, insisten en Madrid, las comunidades conocen desde hace cuatro primaveras, pero que complica la ordenamiento en los centros de salubridad. De ahí que el Sergas esté estudiando la posibilidad de que estos sanitarios en postrero año de formación puedan, a cambio de un cuota adicional y siempre que estén de acuerdo, sustituir a otros facultativos durante su alivio vacacional.
La idea, según ahondó el conselleiro, es que se proxenetismo de una colaboración de carácter «voluntario» y a cambio de «una retribución extra». Sobre el rol y las condiciones en las que trabajarían estos residentes de 4º año, el titular de Sanidade todavía arrojó respuestas. «No puedes hacer que un residente trabaje como médico adjunto, pero sí que pueda trabajar como residente con una prima», explicó premeditadamente de la récipe que la próxima semana compartirá en Madrid. Adicionalmente, amplió que estos sanitarios trabajarían «con supervisión, por supuesto», en los servicios de urgencias. Sin bloqueo, la idea sería dejarlos solos en las consultas de atención primaria.
Entre las opciones que se barajan en el Sergas está todavía la de ocasionar ‘médicos itinerantes’. O lo que sería lo mismo, doctores que podrán cubrir «ausencias o tensiones puntuales en determinadas localidades», teniendo en cuenta que la presión dista mucho en localidades turísticas que deben encargarse aluviones de visitantes que no llegan a otras. En contacto directo con las áreas sanitarias, el cronograma que se maneja en el Sergas apunta que el divulgación de este plan se realizará «ayer de verano». «Imagino que a mediados de junio tendremos una cosa fija», confirmó Gómez Caamaño.
De los 400 residentes de postrero año que se forman a día de hoy en Galicia, 124 lo hacen en la singularidad de Medicina de Comunidad, una de las que más problemas acarrea. La autonomía que tanto el Sergas como el ocupación les concedieron en ocasiones pasadas garantizarían el exposición de su tarea sin la supervisión de un tutor en entornos concretos, como podría ser una consulta. La propuesta del Sergas deberá ser derivada a Madrid como tarde el próximo día 3 para que sea valorada en el interterritorial.