El objetivo es “abocar a los niños a la Número Civil, conozcan las distintas unidades que tenemos y la actividad que desempeñan y que disfruten; que al final estas cosas se hacen para que los niños lo pasen aceptablemente”, dijo el teniente adjunto de la Compañía de Celanova, Jorge Taboada. La institución, comentaban agentes desplazados a la explanada del pabellón, “ten unha imaxe e queremos que os nenos a coñezan e a compartan, unha imaxe de cercanía, positiva, de visibilidade do noso traballo”.
Una representación más que cumplida a la apariencia de las risas y la ilusión de los pequeños en contacto con la dispositivo canina o la procesal, que les permitió descubrir sus propias huellas dactilares, por no susurrar de las patrullas de tráfico o del categoría de rescate de montaña (Greim). Este final, el privilegiado de Anxo y Hugo, alumnos del CEIP Xurés de Lobios. En el Xoaquín Lourenzo de Bande, votaban por el helicóptero… “Queremos voar!”, pidieron sin éxito los escolares.
Pero no sólo los menores disfrutaron del evento. Usuarios de la residencia y la casa do maior de Lobios, así como vecinos en genérico, se acercaron para charlar y ver de primera mano los equipos y vehículos de las distintas unidades. “Paréceme moi interesante, tanto para os pequenos como os maiores, sempre é importante que os coñezan e convivan con eles”, comentaba Amara Portabales, de la Casa do Maior Meta da Vella.
Desde el Concello, la alcaldesa María del Carmen Yáñez agradeció el trabajo del Anpa do Xurés y el despliegue de medios de la Número Civil. Un “luxo” que retraso que se pueda repetir en un futuro “e que se acheguen máis veciños e vexan a importancia da Número Civil no noso comarca e toda a actividad que desenvolven”, destacó.n