Unos 150 propietarios de Viviendas de Uso Turístico de Valencia se han manifestado esta tarde frente al Junta para protestar por los actos de «turismofobia» que se han producido en las últimas semanas en la ciudad y defender el derecho al turismo.
La protesta estaba encabezada por una pancarta en la que se podía repasar «Por el derecho a osar , por el derecho al turismo», y durante la concentración se han repartido octavillas dirigidas tanto a la ciudanía como a los usuarios del sector, en las que se justificaba la protesta «para manifestar el rechazo tanto a las restricciones que el Junta quiere imponer al turismo, como a las campañas de turismofobia alentadas por razones ideológicas o económicas ajenas a nuestra actividad».
Los convocantes han asegurado que «frente al relato de la supuesta afección a la convivencia municipal», el comercio minorista y el precio de los alquileres, su sector representa el 1,63% del parque residencial, registró 84 denuncias por alguna queja municipal de los 738.770 turistas alojados en 2023 y, por el contrario, generaron 561 millones de euros a la capital particular.
AOTUR y VIUTUR recuerdan que las Vivienda de Uso Turístico han deslocalizado, desestacionalizado y democratizado el turismo, permitiendo a toda la tipología de turistas (nómadas digitales, parejas, familias o personas mayores), poder correr con una modalidad alojativa distinta a la de tradicional proposición hotelera.
Por todas estas razones, VIUTUR y APTURCV aseguran que defenderán la actividad de «un sector que desde hace abriles lucha contra el intrusismo y el monopolio, defiende el derecho a osar la modalidad alojativa turística que prefieras, y genera empleo y capital al sector Servicios y al comercio minorista».
«Porque el Derecho a designar una vivienda o morada turístico no solo corresponde al propietario o hospedador, sino al huésped, todavía/consumidor, es asegurar, a la ciudadanía», concluye el manifiesto.