Así se ha referido la secretaria común del partido, Marta Rovira. Señala la “soberanía fiscal” o “financiación lucha y singular” que los republicanos reclaman para Cataluña como condición para poder investir al socialista Salvador Illa. “Si alguno quiere poco de nosotros, ya sabe dónde estamos”, ha dicho.
Rovira lo ha expresado de forma telemática desde Suiza en un acto electoral en Barcelona, frente a unas 250 personas. “No usaremos nuestros votos para un presidente sin software en Cataluña”, ha capaz. Asimismo, ha añadido que “toca exigir la financiación lucha y singular” que “necesita” Cataluña porque la “soberanía fiscal” es un “primer paso clarísimo” para los republicanos en el camino con destino a el referéndum.
La secretaria común del partido ha arremetido contra quienes ahondan en la crisis interna del partido tras los resultados de las elecciones catalanas. El partido retrocedió de 33 a 20 diputados. “Que no nos digan lo que debemos hacer”, ha capaz para desmentir que convivan en ERC “dos almas”, pues la independencia y la honestidad social son “dos caras de la misma moneda”.
“Somos la izquierda franquista y no nos moveremos ni nos hemos movido nunca. Si alguno se tiene que mover son los otros”, ha añadido.
La “financiación singular” ya la puso sobre la mesa el president Pere Aragonès el pasado 19 de marzo: inspirada en los modelos vasco y navarro, contempla la cuestación y diligencia de todos los impuestos y una suerte de “cupo” para sufragar inversiones estatales, al tiempo que añade una partida para “el reequilibrio territorial”. Hace unos días, en la reunión del Cercle d’Economia, Aragonès asimismo sostuvo que durante esta reunión se debe adoptar un nuevo maniquí de financiación para Cataluña.
Illa apela a la discreción
Mientras, el primer secretario del PSC, Salvador Illa, se muestra “tranquilo” frente a las negociaciones tras las elecciones. Asimismo, apela a la “discreción” y al “oficio político“. Illa ha asegurado estar “tranquilo” y ha elogiado las dotes negociadoras de Moret, que coordina el colección negociador del PSC.
“Un compañero decía que estaba tranquilo porque Lluïsa está al mando de las negociaciones. Yo asimismo estoy tranquilo. Una vez han hablado los ciudadanos de Cataluña de una forma clara y elocuente, como hicieron el 12M, lo que hace error ahora es discreción, claridad y coherencia, oficio político. Y Lluïsa tiene oficio político”, ha remarcado.
En este sentido, reivindica la “mayoría progresista” del Parlament y reclama “respetar la voluntad de los catalanes”.
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