Cuatro días a posteriori de que el corregidor de Fuenlabrada, Javier Ayala, dictara un decreto de paralización inmediata de las obras de acondicionamiento del espacio de La Cantueña, en la ciudad, para establecer allí un centro de acogida de menores inmigrantes no acompañados, el Gobierno regional madrileño asegura que dicho decreto «no es efectivo» por el expediente que interpusieron el viernes contra él, y que «evita que el decreto entre en vigor», aseguraron a torrevieja news today fuentes de la Consejería de Tribu.
Hasta el momento, los trabajos allí se habían acotado, informaron, a soportar el material necesario para la tarea. El decreto municipal se dirigía al Gobierno regional y a la empresa constructora encargada de las obras. Según la Comunidad, hasta que se vea el expediente contra el decreto de paralización, éste queda en suspenso.
Desde el Concejo fuenlabreño, sin confiscación, afirman que «no tenemos constancia del expediente» anunciado por la Comunidad, ya que nadie les ha transmitido traslado del mismo, por lo que continúan delante con su intención de que las obras se paralicen de inmediato.
De momento, han podido comprobar que las obras no se han parado, pero son firmes: «En cuanto se cumplan los plazos para la paralización, las pararemos nosotros».
El Gobierno regional argumenta como razones para iniciar estos trabajos, incluso en contra de la opinión del Concejo, que la Ley de Suelo le permite realizarlos por razones de emergencia e interés normal, recogidas en el artículo 163 de la citada norma.
El Concejo, por su parte, asegura que el espacio de La Cantueña, de propiedad municipal, se cedió a la Comunidad de Madrid mediante un convenio para otros usos, de carácter cultural y medioambiental, muy diferentes de los que ahora se les quieren dar.
El plan de la Comunidad es que este centro, que tendrá en su inicio espacio para 100 menores, se ponga en marcha en el segundo semestre de este año. Sumaría su proposición a la que ya existe en varios pisos tutelados y centros de acogida para menores inmigrantes no acompañados, que están situados en la ciudad de Madrid. Este dispositivo, unido a los demás que existen, supondrán ofertar unas 459 plazas en total. El Gobierno regional pone en marcha este centro dada la creciente venida de menores solos: aseguran que desde enero han recibido más de 1.000 menores, más que en todos 2023.