La Casa da Civilización de Verín acoge este miércoles, a las 18,00 horas, una reunión informativa organizada por la Consellería de Medio Rural, en colaboración con el Concello verinés, sobre los peligros de la flavescencia dorada, una enfermedad muy dañina que afecta a los viñedos.
La flavescencia está provocada por un fitoplasma, un organismo microscópico similar a una bacilo, que desorganiza el funcionamiento de las cepas. La gravitación de esta plaga radica en que las vides afectadas non son recuperables, y consecuentemente acaban muriendo.
Su propagación se produce mediante contagio a través de un insecto vector, la cicadela o Scaphoideus titanus. Las hojas de las plantas afectadas cambian prematuramente de color, amarillo en las variedades blancas y rojizo en las tintas.
No tiene tratamiento
En palabras de Encarna Rodríguez Soto, jefa del Servizo de Explotacións Agrarias en Ourense, “polo de agora non hai ningún produto que se lles poida aplicar nin tampouco ningún tratamento. Por consiguiente, no caso de que se comezara a estender, o problema sería severo”.
Rodríguez será la encargada, unido a Carlos Mansanet, inspector y patrón del Radio de Sanidade e Produción Vexetal en la provincia, de impartir esta charla “preventiva, para que os viticultores da zona teñan coñecemento das características e síntomas que presenta esta enfermidade”.
La responsable autonómica reconoce, no obstante, que en la comarca de Monterrei, “en principio, non hai presenza de cepas afectadas”, pero su ubicación, al hacer frontera con el país vecino de Portugal, “onde si hai unha zona demarcada suficiente ampla e o suficientemente preto de aquí, fai que o risco sexa maior”.
Conveniente a esta razón, por el momento Medio Rural solo tiene previsto celebrar la charla de hoy en Monterrei, para la que convocan a todos los productores con viñedos: “Fixemos un chamamento a todos os concellos para que dean aviso”.
En Ourense desde 2023
El fitoplasma de la flavescencia llegó en 1949 a la región francesa de Armagnac a través de los Estados Unidos. En España, los primeros registros datan de 1996, en la comarca catalana del Alt Empordà, dada precisamente su cercanía con Francia. En Galicia, los primeros brotes se declararon en plantas aisladas de Arbo, Crecente y As Neves, en Pontevedra, y Padrenda, en Ourense, a principios del año pasado.
La razón por la que estas fueron las dos primeras provincias gallegas afectadas por la flavescencia dorada es incluso por contacto con Portugal, donde el fitoplasma se encuentra presente desde el año 2006. Por aquel entonces, las autoridades del país luso decretaron una zona tapón de 2,5 kilómetros, y que incluso incluía a esos cuatro concellos de Galicia con vides infectadas por el parásito vegetal.
La Xunta no tardó en reaccionar, y en febrero de 2023, el Diario Oficial de Galicia (DOG) declaró la presencia de la plaga en la comunidad. Incluso decretó la aplicación de un insecticida de modo preventiva, y originarse y destruir las cepas afectadas por la enfermedad. Si los viñedos tienen más del 20% de vides afectadas, entonces debe arrancarse y destruirse por completo para evitar el contagio.