Tras el terrible suceso, los cuerpos de las dos chicas aparecieron a un kilómetro de distancia, mientras que el del chavea todavía no ha aparecido. Estos hechos se dieron el viernes pasado en el río Natisone, cerca del municipio de Premariacco, en la región del Friuli, noreste de Italia.
Estos tres amigos habían ido a sobrevenir el día en el río y llegaron caminando, con el agua hasta los tobillos, hasta una pequeña isla en el medio del cauce. Sin bloqueo, fueron las fuertes lluvias caídas durante las últimas horas las que provocaron que las aguas comenzaran a crecer de trastazo. Cuando quisieron interpretar, el agua ya les llegaba a las rodillas y la isla desapareció. Tratar de ascender a la orilla era muy peligroso.
Un revolcón en la desesperación
Fue en un momento desesperado cuando los tres jóvenes se abrazaron formando una barrera de defensa más válido entre ellos para interpretar contra la violencia de las aguas. Aún así, no pudieron con la corriente, que los arrolló. Ningún de ellos pudo servirse a las cuerdas que les habían valiente los bomberos.
En la zona en la que se dio el suceso, está prohibido bañarse, ya que son comunes estas crecidas inesperadas. De hecho, las aguas atraviesan unas gargantas muy estrechas a gran velocidad.
Las víctimas han sido identificadas como Cristian Casian Molnar, de 25 primaveras, Bianca Doros, de 23 y Patrizia Cormos, de 20, según ‘TN’. Patrizia era la única italiana, puesto que sus amigos eran rumanos. El cuerpo de Molnar todavía se está buscando.
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