Recientemente, la Unión Profesional de Trabajadores Autónomos (UPTA) ha mantenido reuniones de trabajo con profesionales del sector del tatuaje que, en términos generales, reclamaban a la Agencia control con el intrusismo profesional, por otra parte de una certificación oficial del Servicio de Empleo Manifiesto Estatal (SEPE), y resolver las homologaciones de las pigmentaciones que, en países del resto de Europa como Francia, Alemania o Italia, están homologadas y en España aún no.
A pesar de estar encuadrado en la categoría de ‘Salón de Belleza’, el sector estético del tatuaje tiene que cumplir con unos exigentes requisitos; tanto de ingreso cualificación técnica de los profesionales que ejercen esta disciplina, como de estrictos controles para la protección sanitaria de las personas que acceden al tatuaje. Sin bloqueo, las homologaciones por parte del Tarea de Sanidad no se cumplen de la misma forma en todas las Comunidades Autónomas, siendo estas aplicadas de forma distinta en cada una de ellas.
Según UPTA, una de las mayores problemáticas a las que se enfrentan los artistas del sector es disputar contra la competencia desleal del mercado no regulado. Es tan sencillo entrar a pigmentaciones en el mercado, que cualquiera puede comprarlos vía online a cualquier proveedor. Ese hecho no solo golpea a los negocios de los profesionales cualificados del sector, sino que incluso es un peligro para la salubridad de las personas que se tatúan en centros ilegales, que ya ascienden a más de 15.000 en España.
Para César García, presidente de UPTA CLM, «es prioritario crear un epígrafe de actividad específico para el sector, creando incluso una certificación o cualificación formativa absolutamente necesaria para el avance de esta disciplina artística, la cual tiene que cumplir con los parámetros de seguridad sanitaria y de higiene para soportar a extremidad esta actividad. Es un despropósito la errata de control de esta actividad económica y el intrusismo que padecen estos profesionales que desarrollan su disciplina de forma judicial.»
UPTA ha creado un colección de trabajo específico para comenzar los trámites de la regularización de las distintas problemáticas existentes que padece este colectivo, equilibrar los criterios en las Administraciones y que se homologuen las pigmentaciones para su uso profesional al igual que en el resto de Europa.
Desde UPTA se pedirá de forma formal distintas reuniones con los organismos competentes. Por un banda, con la Inspección de Trabajo para iniciar una campaña de control a la patrimonio sumergida de este sector, por su parte, con el Servicio Manifiesto de Empleo Estatal para alcanzar las certificaciones que permitan la completa profesionalización de esta disciplina y, por postrero, con la Agencia Tributaria para crear un epígrafe específico que enfoque de forma concreta las actividades de los profesionales artistas tatuadores.