Santiago se convierte desde este viernes en epicentro de la humanidades. Hasta el próximo domingo 16, en la plaza de la Quintana de la renta gallega se instala una carpa, punto primordial del Festival de la Recital, Selic, en la que estarán presentes hasta veinticinco librerías, cada una en su propio espacio. Más allá de comprar libros, los visitantes podrán asistir a las sesiones de firma que ofrecerán distintos autores cada día; y, como cada año, la feria llega a Santiago cargada de actividades adicionales: paseos, talleres, mesas redondas y música en directo. Adicionalmente de contarse con la presencia de nombres del primer plano franquista e internacional; de forma destacada, el escritor irlandés John Banville y la autora palestina Adanía Shibli. Todo ello, un año en el que el cómic y la novelística negra se dan la mano para tejer el hilo conector de la estampación.
Según explica a torrevieja news today Camilo Franco, ordenador de la Selic, el software de esta estampación «tiene como intención equilibrar la propuesta internacional y la propia», incluyendo nombres que «llaman la atención» y justifican el «carácter internacional» de la ciudad; pero velando por que los autores y autoras gallegos asimismo gocen de representación. «Se intenta ofrecer un panorama para cualquier maestro, que tenga un poco para todos». Durante los primeros siete días, la programación va dedicada a la humanidades genérico. Pero en los tres siguientes se desarrolla el ciclo Selic Criminal, que pone el foco en la novelística negra, la pandilla diseñada y el variedad «para adultos» con un software más específico.
Adicionalmente de la esperada turista a Santiago del novelista John Banville (Benjamin Black), premiado con el Príncipe de Asturias y el Booker, con sesión de charla incluida –sábado 15, 20.00–, la feria traerá a Manel Cráneo y ‘Cinza’, su interpretación en cómic de la novelística de Xavier Alcalá; y a Carlos Portela y Miguelanxo Prado para charlar sobre las características del cómic indignado. Franco postura por «relacionar el cómic con determinados géneros en el interior de sí mismo». No tratarlo como un variedad «per se», sino mostrar que en el interior hay «mucha variedad» por conocer».
«Todo lo que sea recitación, independientemente de su variedad o su formato, a la Selic le interesa. Por eso alternamos novelística, poesía, teatro, cómic y un poco de música para aderezar. Intentamos que ningún maestro deje de tener motivos para pasarse» la feria, expone su ordenador. Es un festival de públicos muy amplios. En el que, encima de ofrecer una panoplia de géneros literarios, da cabida a «casi todas las conversaciones que están presentes en la sociedad» para su debate en el situación del certamen. «Intentamos que todo el mundo interesado en adivinar, o que quiera interesarse en adivinar, encuentre en la Selic un espacio en el que charlar de las lecturas, encontrar nuevas, hacerse con libros y conocer a autores y autoras. La afición es invitar a los máximos públicos posibles y tantos tipos de lectores y lectoras como sea posible», abunda el ordenador de la Selic.
Explorar y exponer
Una de las secciones más amplias que ofrece la feria son los paseos literarios, que este año asimismo se enmarcan en las nuevas ‘sesiones golfas’ que se proyectan para este sábado y los días 14 y 15, con actividades un poco más tarde de lo habitual. Al hilo de los horarios, Franco expone que este año, y al coincidir en fin de semana, se «estira» el tiempo de comprensión de la carpa. «Con el horario que tiene Galicia, a las diez de la tinieblas es de día. Aunque no todo el mundo lo vea así, a mí me parece una hora maravillosa para charlar y escuchar sobre humanidades, o para comprar un compendio… Si es una hora ideal para estar en una terraza, lo es para estar en la carpa y divertirse», comenta entre risas. Es, asimismo, una «prueba a futuro»; en este caso, para comprobar si las horas crepusculares ofrecen veterano comodidad –en cuanto a sensación térmica– y cómo de proporcionadamente casa la música para divertir la velada.
Precisamente, y aunque la Selic es un festival «generalista», se propone ir explorando, cada año, un variedad diferente, para ponerlo en presencia de los luceros de visitantes y vecinos por igual; o, como sucede con el cómic, incluso subgéneros, caso este año de los tres días de Selic Criminal. Igual que un campo en el que cada año se plantan nuevas semillas, el objetivo es que, poco a poco, el conocido conozca, cada vez, más vertientes de la humanidades para que consolide sus preferencias. «Cada estampación vamos intentando acercarnos a uno; y, con los primaveras, creo que asimismo se profundizará un poco en el maestro de cómic que hay en la ciudad», que no deja de ser uno de los «nichos» del conjunto genérico, comenta Franco.
«Ahora tenemos [un enfoque] muy claro, el criminal, y creo que el del cómic es uno que crecerá a futuro, porque cada vez hay más muchedumbre interesada. Es un espacio que podemos cultivar y siquiera hay tantas citas en Galicia», recuerda el responsable de la Selic. «Como este, iremos abriendo otros espacios en los que la muchedumbre pueda, incluso, cambiar de variedad predilecto si le apetece».