Un hombre finge ser cura para estafar más de 15.000 euros a sacerdotes en Alicante


Indignación en Alicante por dos presuntos timos acontecidos en las iglesias de las localidades de Catral y Bigastro. La Pelotón Civil ha detenido a un hombre que se habría hecho sobrevenir por cura para estafar poco más de 15.000 euros a varios sacerdotes con un método similar al ‘hijo en apuros’, mediante el que se ganó su confianza para que le prestaran mosca para falsos familiares enfermos.

Un supremo de Ontiyent declaró el ingreso en prisión provisional del supuesto estafador, el cual tendría hasta una docena de reclamaciones judiciales por hechos similares en todo el división doméstico, según ha aventajado el diario Información.

En los casos de los citados municipios alicantinos, el método para engañar a sus víctimas fue idéntico y entre las denuncias presentadas solo transcurrieron cinco días. En el primero, pidió ayuda al sacerdote para pasar revista a su padre enfermo en Salamanca ofreciéndole un teléfono de contacto para que pudiera corroborar los hechos.

Así fue, el párroco de Catral llamó y al otro costado se encontraba otro supuesto cura, que dominaba el idioma clerical con total soltura y que en ingenuidad era el mismo supuesto timador, con el que mantuvo conversaciones durante varios meses.

Finalmente, acabó prestándole el mosca tras establecer una suerte de amistad. Le dejó 300 euros, según publica este semanario, pero no se quedó ahí, pues le siguió insistiendo con una herencia de 70.000 euros y varios pisos para la cual tenía que fertilizar un impuesto de sucesión si quería obtenerla. De este modo, le prestó otros 14.800 euros y pocos días a posteriori ya nadie cogía el teléfono y todo se volvió de color bruno estafa.

En paralelo, el segundo caso, el del sacerdote de Bigastro, fue prácticamente simultáneo y con un modus operandi similar, en el que recibió la llamamiento de un sacerdote fariseo de Salamanca para pedir ayuda para un diácono de su iglesia que necesitaba mosca por una enfermedad y al que entregó 500 euros.

Por estos hechos, la Pelotón Civil inició una investigación que acabó situando el supuesto estafador en la plaza valenciana de Aielo de Malferit, quien incluso habría suplantado la identidad de otras personas para contratar líneas telefónicas y hospedarse en hoteles sin usar su documentación.

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