El PSOE sigue empeñado en darle la envés a cualquier contrariedad y en convertirla en un revulsivo electoral. En unas elecciones marcadas por la citación de la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Begoña Gómez, para resolver como imputada el próximo 5 de julio, por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias, los socialistas se lanzan a ensalzar su figura, convirtiéndola en mártir y heroína al mismo tiempo. Este viernes, en el candado de la campaña europea, se han repartido pulseras y chapas, algunas como las vistas en el nuevo concierto de Taylor Swift en Madrid, con lemas en apoyo a la esposa del patrón del Ejecutor.
‘Free Bego’, se leía en una de las repartidas ayer del mitin en Fuenlabrada (Madrid). «Siniestra», se ve en chapas acompañadas de un corazón, rojo socialista, dando la envés al alarido de desavenencia del presidente de Argentina, Javier Milei, contra los partidos de izquierdas. Gómez, a pesar de estar investigada por corrupción, apareció en divulgado adyacente a Sánchez en un mitin en Benalmádena (Málaga) este miércoles y fue coreada por el divulgado asistente, con gritos de «Begoña, Begoña, Begoña».
La mujer del presidente ha sido citada a resolver por un tribunal de Madrid, y sus cartas de recomendación a empresarios que a posteriori se beneficiaron de contratos públicos están siendo todavía examinadas por la Fiscalía Europea. Sánchez, en una segunda carta a la ciudadanía, insistió en que todo se debe a una operación de la «ultraderecha» para desacreditar a su entorno y hacerle daño, en plena contienda electoral.
Esta no es la primera vez que el PSOE intenta utilizar un ataque contra el presidente como espuela electoral. Los socialistas ya asumieron el meme de Perro Sanxe como propio y, a posteriori, Sánchez, parafraseando a Milei, ha listo que serán «los zurdos y las zurdas», como se refiere el presidente argentino a la izquierda, aunque utilizando lengua inclusivo, quienes acaben con «la internacional ultraderechista». Ahora, imputada su mujer por corrupción, el presidente no ha dudado en convertirla en un supuesto símbolo de resistor frente a la presunta desavenencia contencioso. En el mitin de candado de campaña, el partido ya ha repartido pulseras y chapas en su honor.