Emocionada, su hija señaló que “Tuvo una vida extraordinaria y se fue en el momento adecuado”. Ahora lo recuerda como una persona que “dedicó su vida a su país, que fue objeto de su obra artística”. “Ha muerto Fernando Botero, el pintor de nuestras tradiciones y defectos, el pintor de nuestras virtudes. El pintor de nuestra violencia y de nuestra paz. De la paloma mil veces desechada y mil veces colocada en su trono”, lamentó en un mensaje en X (ex Twitter), el presidente colombiano, Gustavo Petro.
Botero había vivido durante años en la ciudad italiana de Pietrasanta donde hasta sus últimos días mantuvo su taller. “Lamentamos profundamente la partida de Fernando Botero, uno de los más grandes artistas de Colombia y del mundo. Siempre generoso con su país, gran amigo y apasionado constructor de paz. Nuestro más sentido pésame a toda su familia”, expresó en redes sociales el expresidente y premio Nobel de la Paz Juan Manuel Santos.
Una vida dedicada al arte
El artista estudió en Colombia y en Real Academia de Arte de San Fernando de Madrid. En la década de 1960 comenzó a exponer en Estados Unidos. Lo hizo con una primera exposición en el Milwaukee Art Center. Ha regalado decenas de obras a su Medellín natal. Dos esculturas muy populares en la ciudad llevan su firma en Barcelona: el gato de la Rambla del Raval y El Caballero de la Terminal 2 del Aeropuerto. Sus esculturas también ocuparon las aceras del Campos Elíseos.