El corregidor de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, aseguró este miércoles que «ya quisiera» Sánchez tener el «respaldo» que tienen tanto él como Isabel Díaz Ayuso «por parte de los ciudadanos», en respuesta a unas declaraciones de Sánchez en las que afirmó que la «sede social» de «la máquina del légamo» está Madrid.
Sánchez hizo estas declaraciones en relato a la crispación, que a su prudencia llega desde la Comunidad de Madrid. El corregidor respondió que «ya quisiera Pedro Sánchez» que la población y la ciudadanía le mostrara «el apoyo en las urnas» que les muestran a Isabel Díaz Ayuso y a él.
«Que las mayorías absolutas no son casualidades, que sus derrotas electorales siquiera son casualidades, que las mayorías absolutas que hay en la Comunidad y en la ciudad de Madrid responden a un percibir mayoritario de la ciudadanía«, subrayó.
Asimismo, criticó que «como no consigue que los ciudadanos le respalden«, »tiene que poner en marcha el ventilador« y »la confrontación, el rencor y el odio« porque »no entiende otra forma de hacer política«.
Añadió que el presidente «no tiene ningún tipo de margen» y que los madrileños ya han «decidido darle la espalda» porque la caudal es «la ciudad más redimido, más abierta y más acogedora que hay».
El corregidor encima instó a Sánchez a que se pregunte por qué «como él dijo en el Comité Federal, tiene un problema en Madrid y tiene un problema en Andalucía« y por qué tantos españoles se están »aburriendo ya de él«.
Asimismo dijo que Sánchez quiere que sus «barbaridades» se respondan con «barbaridades», una «táctica de confrontación» que «aburre» al corregidor, que esta semana calificó de «puto perdedor» al presidente tras las elecciones europeas, parafraseando al ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que se había referido a Sánchez como «el puto amo».
Finalmente señaló que a Sánchez le «parece utópico desobedecer al Tribunal Constitucional» y que «puedan elegir telemáticamente aquellos» que el Tribunal «ha dejado claro que no pueden elegir telemáticamente», en relato a la constitución del Parlamento de Cataluña el martes, en la que el expresident Carles Puigdemont votó desde fuera de España.