A principios del mes de junio 34.376 alumnos de segundo de bachillerato de toda España se enfrentaban a la EvAU, la Evaluación del Bachillerato para el Paso a la Universidad. Una prueba donde la anciano preocupación de los estudiantes es conservarse a la nota de corte que necesitan para poder estudiar la carrera que siempre han querido. Sin retención, Julio Cuenca no debe preocuparse por ello.
Cuenca es discente del Instituto Manifiesto Los Castillos de Alcorcón con un expediente de 10, textualmente. Todas las asignaturas que ha cursado durante su bachillerato tienen esta calificación, obteniendo así una matricula de honor por sus estudios, los cuales acompañaba mientras se formaba como profesional de violín en el Conservatorio.
Los resultados para este estudiantes han sido 14 de 14, obteniendo así la nota más suscripción, ya que en estas pruebas el 10 no es la calificación tope y puedes ampliar tu media con asignaturas optativas que te pueden hacer conservarse hasta el 14.
Una calificación “surrealistamente perfecta”
Esta gran informe ha pillado a Cuenca en su alucinación de fin de curso, exactamente en Canarias. El discente ha admitido que no se esperaba una calificación tan “surrealistamente perfecta”, a pesar de que admitiese que le había desencajado muy admisiblemente. Encima, afirma sentirse muy orgulloso de su trabajo tras un año de “mucho trabajo y esfuerzo”.
Ahora la asunto está en qué va a estudiar, aunque él se orienta en dirección a los números, “investigar matemáticas”.
Desde el centro de estudios donde ha estudiado están muy contentos por la informe. “Muy orgullosos. Encima se lo merece, desde luego, porque ha hecho una trayectoria muy buena en el centro y es muy buena persona y muy colaborador, muy buen compañero, participa en todos los proyectos, tiene muchas inquietudes“, cuenta Corrida Fernández, directora del centro.
Encima, Fernández sabía que sacaría “buenísima nota”, pero “que fuese la mejor nota de la EVAU eso son ya palabras mayores”.
Aprobada la nueva selectividad (PAU) para 2025
¿EVAU o EBAU? Hasta el nombre era diferente dependiendo de la comunidad autónoma. Pero a partir de 2025 se acabó esa diferencia, escribiremos con P el nombre de la Prueba de Paso a la Universidad (PAU). No varían los niveles de exigencia pero sí la metodología, con un único maniquí de prueba que permitirá nominar preguntas, pero nunca eludir partes del temario.
Para cada materia habrá un único maniquí de adiestramiento con diferentes apartados que a su vez podrán contener una o varias preguntas. Se incluye por otra parte la posibilidad de nominar entre varias preguntas. Algunas requerirán respuestas cerradas; otras, semiconstruidas y otras, abiertas.
En cada uno de los ejercicios, la puntuación asignada al total de preguntas o tareas de respuesta abierta y semiconstruida deberá alcanzar como imperceptible el 70 por ciento.
El número total de preguntas debe por otra parte adecuarse a la duración total del adiestramiento, teniendo en cuenta que los estudiantes necesitan un tiempo para ojear y analizar. Y ¿cómo contestarlas? El nuevo maniquí premiará la creatividad, capacidad de pensamiento crítico, consejo y prudencia. Lo que investigación esta reforma es que el alumnado sea capaz de aplicar los conocimientos, no solo memorizarlos.
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