Las comunidades ourensanas del extranjero no dejan a espaldas sus raíces. En Suiza, Alemania o Latinoamérica, los emigrantes conservan las costumbres y se reúnen para cumplir con sus tradiciones. Así lo harán los ourensanos que viven a 5.500 kilómetros de distancia, en Nueva Suéter, Estados Unidos. La comunidad emigrada al país norteamericano se prepara para festejar el San Xoán y, al mismo tiempo, el Día del Padre, puesto que en EEUU se celebraba ayer.
El Centro Orensano de Nueva Suéter se pondrá manos a la brasa este sábado. No se olvidan de la restauración gallega por conducirse en Estados Unidos. Así lo demuestra el menú que prevén para la “horno” de San Xoán: parrillada mixta y sardinas, los dos platos triunfales de la confusión más larga del año.
Siendo en EEUU, no faltarán los perritos calientes para quien no se atreva con las dos propuestas anteriores. Para juntarse, habrá ensalada, caldo, cerveza y refrescos. Solo hay hasta mañana para reservar las entradas, ya que son limitadas frente a una posible elevada demanda. Los precios oscilan entre los 20 dólares para los niños de más de seis abriles hasta los 70 dólares en el caso de los no socios, entendiendo que el coste de la vida de Estados Unidos no es equiparable al de España. Quienes se hagan con estas entradas podrán disfrutar de la fiesta del San Xoán en pleno corazón de Newark, en Estados Unidos y a escasos kilómetros de Manhattan.
Con esta celebración, el Centro Orensano de Nueva Suéter añade un nuevo evento como uno de los más activos de la comunidad emigrante. El pasado 16 de marzo, por ejemplo, organizaron la Festa do Cazador con platos como trastornado y liebre. El centro fue fundado en 1964 y cuenta con la Medalla de Oro al Mérito de la Migración.