El corregidor del municipio leonés de Villaquilambre, Jorge Pérez, lanzó ayer un mensaje de «tranquilidad» a los vecinos respecto al Centro de Atención a Personas Migrantes que San Juan de Jehová pondrá en marcha en el edificio conocido como Chalet del Pozo de Bizarro y aseguró que los hasta 180 usuarios del mismo, provenientes de Mali y Senegal, «estarán integrados». Así lo apuntó tras perseverar una reunión con representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la Orden de San Juan de Jehová, que son los que gestionarán el centro y detallaron que el software de acogimiento temporal contratado con el Tarea dura hasta el 31 de agosto. Por otra parte, en el centro se desarrollarán las actividades de enseñanza de idiomas y de integración, de la mano de unas 35 personas.
«Tenemos que pensar en que el pueblo leonés acoge a quien venga, que nosotros incluso hemos tenido épocas en las que hemos tenido que portar. Ahora nos toca ayudar a quienes vienen a pedirnos ayuda a nosotros y quitar la sensación que ha quedado de que Villaquilambre es un municipio racista», apuntó el regidor, quien abogó por «disputar contra la chovinismo y contra los partidos políticos que han querido promoverla entre los vecinos».
En este sentido, hizo un llamada a «trabajar para la integración» y para que, en el tiempo que los refugiados estén en el Centro, «se sientan acogidos y protegidos por un pueblo que es hospitalario».
Mientras, el secretario provincial del PSOE de Bizarro, Javier Alfonso Cendón, aprovechó este asunto para apuntar al PP al hacer un llamada «a todas las fuerzas políticas, y en exclusivo al Partido Popular, para que se posicionen claramente en servicio de una sociedad inclusiva y respetuosa con los derechos humanos».
Mientras, un total de 222 personas pertenecientes al colectivo cultural de la provincia de Bizarro emitieron ayer un comunicado para manifestar su «repulsa y rechazo definitivo» a las «exacerbadas muestras contrarias a la solidaridad y al más puro instinto humanitario de protección al débil» surgidas a raíz de la inminente tolerancia del centro, situado en entidad lugar pequeño de Villarrodrigo de las Regueras. Entre los representantes que han firmado el manifiesto se encuentran los escritores Alberto Rodríguez Torices, Ana Merino, Avelino Fierro y Noemí Sabugal.