Miles de pisos turísticos funcionan en la región, no sólo en la caudal, y en muchos casos su cumplimiento de la norma es más que dudoso. El Gobierno madrileño ha anunciado la puesta en marcha de un plan para su control y vigilancia, que incluirá un incremento de las multas en los casos de reincidencia en las infracciones.
Madrid es una comunidad cada vez más visitada por turistas nacionales e internacionales. Y el auge de los pisos turísticos ha ido a la par con el crecimiento de las cifras de turistas que llegan a la región. Para controlar que, cuando eligen para alojarse una vivienda turística, lo hagan con todas las garantías, la Comunidad de Madrid anuncia la puesta en marcha de un plan de vigilancia y control.
Así lo ha avanzado esta mañana el guía de Civilización, Turismo y Deporte, Mariano de Paco, durante un desayuno informativo de Europa Press. En el mismo, ha especificado que el plan tendrá varios ejes, entre ellos el incremento de la vigilancia sobre estos establecimientos, doblando el número de inspectores y agravando las multas para quienes no cumplan cuando se ordena el cese de actividad.
Pero asimismo se tendrá en cuenta la reincidencia en las infracciones, a la hora de aquilatar las sanciones que se imponen, que se agravarán en el caso de que se repitan y no se corrijan los incumplimientos.
Madrid tiene miles de viviendas turísticas, y no todas cumplen la reglamento. El Junta de Madrid acaba de poner en marcha una nueva regulación que aspira a que se cumplan unas garantías mínimas en estos establecimientos. Tanto este plan como el de la Comunidad tienen como objetivo asimismo hacer compatible esta actividad económica y esta opción para el alojamiento de los turistas con la convivencia municipal.
En la iniciativa de la Comunidad de Madrid, a los actuales 16 inspectores con que se cuenta se sumarán otros 13,y se incorporarán cuatro profesionales más para la compendio e intercambio de datos, con lo que se duplicará el personal dedicado a este control.
Por otra parte, se endurecerán las sanciones en caso de desobediencia o falsedad, cuando se haya ostensible la desaparecido de la actividad, y se reforzarán o se implantarán sistemas de colaboración e intercambio de información con los ayuntamientos de la región, así como una nueva reglamento relacionada con el impacto en la proposición.