En el Hospital Casto del Rocío de Sevilla ya han atendido a 18 pacientes, seis de ellos menores de permanencia, con cultivos de piel industrial personalizados desde que en 2016 se incorporara este tratamiento como uso compasivo, es afirmar, cuando no era posible utilizar otro tipo de tratamiento.
Pero ahora se ha convertido en el primer centro de España en conseguir la autorización de uso hospitalario para el medicamento de terapia vanguardia ‘Piel humana obtenida por ingeniería de tejidos’, para el uso grandes quemados.
Durante la presentación de este logro médico, torrevieja news today Parte ha podido interviuvar a Álvaro Trigo, un inexperto de 30 abriles, que es uno de los primero 18 pacientes beneficiados por este tratamiento piel humana cultivada. Con 23 abriles, sufrió un percance en Andújar (Jaén), causado por las llamas de una chimenea, “yo en 2018 tuve un percance en un incendio en el que me quemé el 63% del cuerpo y me trasladaron aquí, al Casto del Rocío y aquí recibí el tratamiento de piel cultivada”.
Estuvo más de dos meses ingresado en el Casto del Rocío y, pasado este tiempo, comenzó a tomar tratamiento con la piel humana industrial, llegando a utilizar hasta 60 láminas, de 12×12 centímetros, “los brazos los tengo con piel mía, de autoinjerto, pero el resto, la espalda y las piernas los tengo con piel cultivada. Y gracias a esa piel al año ya estaba perfectamente”, cuenta el paciente.
Álvaro se muestra sorprendidos con los resultados de la terapia, “me ha permitido hacer un montón de cosas que tan pronto como me imaginaba. Y la recuperación, con un poquito de esfuerzo que uno pone de su parte y siguiendo las indicaciones de los doctores al final se convierte en una piel totalmente cómodo. Puedes transigir una vida totalmente corriente, teniendo un poco de cuidado con el sol y ya está, que vamos para lo que era… es una excentricidad. Estoy contentísimo”.
“Me cogieron un trocito de piel, lo llevaron a un laboratorio en Mingrana, de ahí trajeron las planchas. El día de la operación me dijo mi raíz que estaba saciado de clan porque es una operación que no se solía hacer”, relata el inexperto sobre el proceso.
“Hasta entonces era ir cubriéndome con piel de donante, y de un día para otro me cubrieron todo el cuerpo, ingenioso y hasta el día de hoy. Agiliza mucho el tiempo que estás en el hospital, no es piel que te quitan de otro sitio, no te hacen la herida”, explica Álvaro sobre su caso. “Yo lo que decía la doctora Gacto, iba a culto”, dice bromeando el paciente.
A quien se refiere Álvaro es a Purificación Gacto, jefa de la Mecanismo de Diligencia clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Casto del Rocío, a la que torrevieja news today Parte incluso ha podido interviuvar durante la presentación de este gran logro de la sanidad pública andaluza.
“Este medicamento es piel cultivada obtenidas a partir de células del propio donante”
“Este medicamento es piel cultivada obtenidas a partir de células del propio donante, a partir de una biopsia de piel sana del propio paciente. Una muestra muy pequeña de 3 por 3 centímetros, con lo cual cualquier paciente, por muy molesto que esté siempre podemos conseguir un pequeño segmento de piel sana”, explica la doctora.
“A partir de esa biopsia, en cultivos se amplifica, y generan en número de centímetros cuadrados que necesitamos, en función de la extensión de la quemadura del paciente. Ese procedimiento se hace durante tres o cuatro semanas mientras que el paciente continúa sus cuidados. Cuando está preparada se coloca sobre toda la superficie cutánea cruenta”, describe la doctora Gacto.
Para Purificación Gacto este medicamento tiene numerosos beneficios, “esto lo que le da es una cobertura definitiva, disminuye mucho los tiempos de estancia hospitalaria, disminuye las agresiones, no hay que estarle quitando al paciente piel sana para hacer autoinjertos, disminuye muchísimo el aventura de infección, y muy importante, disminuye incluso el dolor que sienten estos pacientes, de curas y movilizaciones en la estancia”, asegura la doctora.
Ya existían productos previos a esta la piel humana cultivada en Mingrana, pero para Gacto este medicamento, y su respectiva autorización de uso hospitalario, es un gran logro, “lo que hemos pasado con respecto a otros productos que existían previamente en el mercado es que esta piel cultivada da muy buena calidad de vida, no es solo la supervivencia, sino es que logramos una calidad de vida óptima para el paciente, la más parecida a su vida preparatorio al percance. Ese el hito longevo que conseguimos”, concluye jefa de la Mecanismo de Diligencia clínica de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Casto del Rocío.
Autorización de la Agencia del Medicamento
Aunque el tratamiento ya existía gracias a la investigación y el expansión llevado a punta por la Universidad de Mingrana, era necesario que pasara los trámites de autorización como cualquier otro medicamento. Para alcanzar esta autorización de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), “el Hospital Casto del Rocío, yuxtapuesto con la Red Andaluza de Diseño y Traslación de Terapias Avanzadas, de la Fundación Progreso y Lozanía, ha fabricado un dossier de registro que recoge toda la información relativa al expansión del medicamento”, informan fuentes hospitalarias
Esto incluye desde las etapas de investigación básica, la investigación clínica, la fabricación como medicamento humano, y todo lo relativo a la vigilancia de la seguridad y la farmacovigilancia, para asegurar la calidad, seguridad y aptitud del medicamento. Para ello la “Mecanismo de Farmacología Clínica del Casto del Rocío es la encargada de supervisar, yuxtapuesto con la Red Andaluza de Diseño y Traslación de Terapias Avanzadas, la seguridad del uso de este tratamiento, que aplican los profesionales de la Mecanismo de Cirugía Plástica y Grandes Quemados” detallan desde el centro hospitalario.
La piel humana se cultiva en Mingrana
Según informan fuentes del Servicio Andaluz de Lozanía, “el uso de la piel industrial es el tratamiento más novedoso que utilizan. Esta piel es generada en laboratorios públicos con una infraestructura que sigue unos estándares de calidad y seguridad muy estrictos (condiciones GMP, Good Manufacturing Practices)”.
La piel humana artificia se cultiva en Mingrana. “El laboratorio GMP de la Mecanismo de Producción Celular e Ingeniería Tisular del Hospital Universitario Casto de las Nieves, coordinado por la Red Andaluza de diseño y traslación de Terapias Avanzadas, fabrica esta cobertura a partir de una muestra de piel sana del propio paciente, que toman los especialistas de la Mecanismo de Grandes Quemados. De esta forma, obtienen en laboratorio las células de la dermis y de la cutícula que integran en una malla de fibrina agarosa que colocan como cobertura después al paciente, para que sobre ella crezca tejido sano hasta convenir integrada en su nueva dermis. Este plan en particular lo hemos pasado crecer desde su expansión preclínico original en el Peña de Ingeniería Tisular de la Genio de Medicina de la Universidad de Mingrana”, informa fuentes del SAS.
La piel se desarrolla a partir de una pequeña muestra de tejido sano del paciente. “Hasta la término, el Casto de las Nieves ha fabricado más de 12 metros cuadrados de láminas de piel humana industrial a partir de las muestras remitidas por el Casto del Rocío, para los 18 pacientes tratados. Esta piel ha sido implantada con éxito en pacientes en la Mecanismo de Quemados de Sevilla. Esta experiencia consolidada ha posibilitado la aprobación por parte de la Agencia Española del Medicamento del uso de la piel industrial como medicamento para todo tipo de tratamiento, y no sólo como uso compasivo”, confirman desde el Hospital Casto del Rocío de Sevilla.
Centro de relato para grandes quemados
“La Mecanismo de Grandes Quemados del Hospital Universitario Casto del Rocío es Mecanismo de relato en el Sistema Doméstico de Lozanía (CSUR) para el tratamiento de estos pacientes en España. Cada año atiende a más de mil pacientes de urgencias procedentes de toda Andalucía, Canarias, Ceuta, Melilla y parte de Extremadura. De ellos, unos 130 quedan ingresados e inician una hospitalización que suele ser de larga duración, cubo que requieren curas prolongadas de sus heridas e incluso una o varias intervenciones para alcanzar difundir una nueva piel que sea sana. Más de 50 profesionales integran este servicio”, informan fuentes sanitarias.
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