«Son lesiones que vemos más en la sala de autopsias que en una consulta de valoración de daños. Podía deber fallecido desde el primer minuto que sufrió las lesiones craneales«. Ese ha sido el parecer del médico forense que exploró a la beocio de Igualada, tras la colosal acometida sexual que sufrió el 1 de noviembre de 2021. Durante la cuarta sesión el entendimiento, este jueves, en la Audiencia de Barcelona, el terapeuta ha agudo que es «un maravilla» que la víctima sobreviviese. No sólo por los golpes que le propinaron en la vanguardia, sino incluso por el «empalamiento» que le causó un colosal desgarro, de unos 15 centímetros. Fue el ataque de un «monstruo».
Cualquiera de esas lesiones, por separado, podía haberle causado la crimen, «tanto por aventura de hemorragia, con la abandono de afluencia inmediata, como por infecciones posteriores», ha certificado el perito. Aunque no ha podido determinarse con exactitud, la principal hipótesis es que su atacante empleó un objeto persuasivo para golpearla y incluso para causarle las lesiones internas. Para recuperarse, necesitó varias intervenciones quirúrgicas y permaneció hospitalizada 30 días.
Les lesiones que sufrió conllevaron un aventura para su vida. «De crimen inmediata», de no ser porque, poco a posteriori de que su asaltante la abandonase en un callejón dudoso, un camionero alertó a emergencias. Durante su exploración, no localizaron ninguna herida defensiva en la beocio. Aunque no se puede demostrar, los médicos creen que su atacante primero le propinó un desgracia en la vanguardia que, probablemente le hizo perder la consciencia. «Pensamos que unos desgarros a nivel sexo de esta magnitud tan monstruosa, es difícil realizarlos en una persona que estuviera consciente. Creemos que si hubiesen sido primero, los gritos de la víctima hubiesen sido audibles«.
El acentuado del ataque, Brian Raimundo C., boliviano de 24 primaveras, se enfrenta a 45 primaveras de prisión por la acometida sexual y tentativa de homicidio. Durante su afirmación, incluso esta mañana, ha obtuso los hechos y incluso ser el individuo que captaron las cámaras de seguridad, abandonando la zona próxima donde el transportista localizó malherida a la víctima. Respecto a la chaqueta que, cinco meses a posteriori de aquella plazo, localizaron los Mossos en su adoquinado con crimen de la beocio, ha asegurado que la localizó en la calle y, como había perdido la suya, se la puso porque tenía frío.
Antaño de que Brian haya respondido a preguntas de su defensa, un perfilador de la Policía catalana ha asegurado que el sospechoso es agresivo, impulsivo, y que muestra rasgos psicopáticos. Acumula tres agresiones previas. La primera, a su hermanastra de 7 primaveras, a la que violó en 2015, y por ello se encontraba en voluntad vigilada, y en tratamiento psicológico. Posteriormente maltrató y vejó a sus dos parejas. Una de ellas lo denunció. «Pasó de asaltar a sus parejas a una víctima desconocida; podría aparecer a convertirse en un delincuente sexual homicida», ha agudo el hábil.
El asaltante, según el perfil del dominio de descomposición de la conducta criminal, actuó para causar el mayor daño posible a la adolescente. La golpeó de forma colosal. «Nunca en mi carrera profesional había pasado estas lesiones», ha asegurado el perfilador. El entendimiento terminará mañana, con los informes de las partes. En caso de ser condenado, el acentuado ha pedido cumplir la pena en España y no ser expulsado a su país.