“Podemos mirar perfectamente a Suecia a los ojos y si damos una buena versión de España, ganamos el partido”
“Podemos mirar perfectamente a Suecia a los ojos y si mañana damos una buena versión de España, ganaremos el partido”, dijo Vilda en la rueda de prensa previa al partido de España contra Suecia.
España se enfrentará a Suecia por un pase histórico a la final, un rival al que La Roja aún no ha ganado. Vilda cree que el balance es “una motivación más” para el duelo decisivo por las semifinales del Mundial, aunque es consciente de que el adversario “exigirá la mejor versión” de España.
“No haber ganado a Suecia todavía en la historia es una motivación más y estamos en una posición de oportunidad”, dijo. “Está muy bien que ya estés con esta inquietud, estos nervios, porque esto bien encauzado nos da fuerzas para competir bien mañana”, agregó.
El técnico destacó que la principal amenaza de la selección nórdica son sus “condiciones físicas”, ya que es un equipo “tremendamente potente físicamente” y muy “peligroso” en las jugadas a balón parado, así como en sus transiciones ofensivas, pero aseguró que España se está preparando En todos los niveles.
Alexia Putellas, “preparada para todo”
“Somos España, nuestro juego es reconocible, sabemos hacer tanto defensiva como ofensivamente. Pero tengo claro que se nos va a exigir nuestra mejor versión”, dijo. Aunque no dio pistas sobre el once inicial, destacó que Alexia Putellas, que acaba de regresar a los terrenos de juego, está evolucionando de forma “muy positiva” y está “preparada para cualquier cosa”.
Vilda también agradeció al presidente de la RFEF su apoyo durante la rebelión del ’15’: “Quiero valorar el apoyo y el respaldo de Luis Rubiales desde el primer día. Sin eso, seguramente no estaríamos aquí ahora mismo, todo no habría pasó esto. Tenemos un presidente que reaccionó con valentía y apostó por mí y por mi cuerpo técnico. Enhorabuena por gestionar todo este proceso”.
España y Suecia se enfrentarán en una fecha que definirá al gran finalista este martes en el Eden Park Stadium de Auckland.