Cuando queremos ir de descanso a otro país, lo habitual es decantarnos por correr a su caudal, ya que es el división que mejor suele estar preparado para los turistas y donde más facilidades y servicios necesarios encontraremos. No obstante, en muchas ocasiones podemos estar perdiéndonos ciudades que merecen mucho más la pena que una caudal porque no tienen tanta auge o no son tan conocidas.
Esto sería poco parecido a lo que puede ocurrirles a algunos turistas británicos con España. Por otra parte de Madrid, caudal del país, hay otras ciudades muy típicas de revistar como Barcelona, oportuno a que está en la costa y más cercana a la frontera meta de la península.
La ciudad condal es de las más populares entre los extranjeros pero, tal como refleja un artículo del diario ‘The Sun’, parece que se están abriendo a otras opciones en las que ahorrarse unos euros y disfrutar de lugares españoles con menos muchedumbre. Por otra parte, de este división catalán todavía destacan notablemente su cocina.
Una tranquila ciudad catalana en la que engullir muy proporcionadamente
La ciudad de la que el medio britano afirma que «es obediente ver por qué muchos viajeros evitan Barcelona en ayuda de su hermano pequeño catalán», es Gerona, Girona en catalán. Esta asiento de interior parece no tener nadie que envidiar a la tan visitada Barcelona. Desde ‘The Sun’ la nombran como ‘La ciudad de los cuatro ríos’ y una de las primeras cosas que destacan con empeño es su propuesta gastronómica.
Con ello, no dejan de nombrar el restaurante El Celler de Can Roca, dos veces campeón del precio al Mejor restaurante del mundo, contando con tres estrellas Michelin y una repertorio de calma de 12 meses para poder engullir o cenar allí. Así, el redactor, Marcos Leach, se lamenta de no acaecer podido probar los platos de tal cocina.
Lo que sí ha probado, y parece que le ha fascinado, son los famosos Xuixos, unos bollos fritos llenos de crema catalana y espolvoreados con azúcar por fuera que deleitan el paladar de todo el que lo prueba. El redactor de ‘The Sun’ se refiere a ellos casi como una experiencia religiosa: «Nuestro primer simpatía, nuestro primer beso, nuestra primera casa, lo que sea. Y así es como siempre recordaré mi primer Xuixo». Por otra parte, los define como «delicia gastronómica» y añade lo subsiguiente: «Son una parte tan importante de la identidad de Girona como cualquiera de los edificios y ruinas históricos del siglo I a. C., cuando la ciudad fue fundada por los romanos».
Un casco antiguo codiciable
Y es que el patrimonio histórico y arquitectónico gerundense no pasa desapercibido. Por otra parte de hacer mención particular al entramado de calles del corazón del casco antiguo donde encontrar muchos locales donde venten Xuixos, indicando que los mejores vienen de Can Castelló, The Sun halaga esta parte de la ciudad por sus maravillas aquitectónicas.
De la catedral destaca la «intrincada mampostería de bestias fantásticas y escenas bíblicas en los claustros, así como un retablo de plata tachonado de brillantes piedras preciosas», siendo otros utensilios reseñables las murallas de la ciudad, que se extienden desde el Paseo Arqueológico hasta los Jardines de la Muralla.
Para cruzar el río Onyar, encontramos una curiosa conexión de Gerona con París, y es que el puente Pont de les Peixateries Belles, fue diseñado por Gustave Eiffel antaño de hacer la famosa torre parisina, siendo este uno de los puentes más emblemáticos. Al cruzarlo se pueden observar las coloridas casas típicas de la ciudad, para posteriormente adentrarte en las callejuelas, plazas y jardines que hacen de Gerona un división tranquilo pero repleto de espacios para disfrutar y descubrir. Desde ‘The Sun’ hablan de ella como «un pueblo reciente, con pequeñas plazas rodeadas de elegantes cafés y boutiques».