Las Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT), o lo que es lo mismo, las partes de una ciudad que pueden tener dispensa absoluta de horarios comerciales durante unos meses o todo el año según el calidad de viajeros que recibe no parecen suceder parqué sintonía con Córdoba o, por lo menos, con sus operadores comerciales de pequeño tamaño que vienen discutiendo la fresco orden de la Unión de Andalucía para la haber. De hecho, aunque fue una medida que se puso en marcha en 2022 y abarcó a toda la ciudad durante cuatro meses al año (septiembre y octubre más abril y mayo próximo con la Semana Santa), tanto el Comunidad como los sindicatos y el pequeño comercio están armando una táctica en la que puedan demostrar que el paso ha sido errado. Ni más empleo ni más atención a un turismo que, a su proceso, se estacionaliza en otros meses y, sobre todo, en el Centro histórico-comercial.
Todas estas partes llegaron al acuerdo de hacer un documentación donde se pusiera de manifiesto con cifras la idoneidad del cambio auspiciado por la Unión, y ayer mismo avanzaron algunas conclusiones (sin muchos números) entre las que destaca que «la revisión debe hacerse en función de los espacios en los que existe anciano afluencia de turistas y que no debería exceder el distrito Centro que acumula propuesta cultural y patrimonial», la zona Unesco, para entendernos.
La consultora Dialéctica Plural plantea de este modo que se pase de cuatro meses a tres (abril, mayo y octubre) más la Semana Santa (que ya estaba fijada con anticipación). Y en materia de empleo, el estudio descarta que la ampliación a todo el casco urbano «haya traído consigo un aumento de los puestos de trabajo», especifica. Recuerda la consultora que las zonas donde sí funciona más esta dispensa horaria para toda la ciudad es en los puntos turísticos costeros «donde la medida puede resultar beneficiosa».
Hay que recapacitar que durante el primer año de vigencia las protestas sindicales se hicieron notar sobre todo en determinadas grandes superficies que sí decidieron aclarar todos los domingos de esos cuatro meses. La queja de los representantes de los trabajadores pivotaba sobre la conciliación sindical, básicamente.
Aunque de estas zonas con flexibilidad horaria además se pueden beneficiar los vecinos de su entorno, el espíritu de la medida va dirigido a satisfacer la demanda que puedan traer unos viajeros que tanto el sector como el Consistorio entienden que se concentran en el caso de Córdoba en zonas muy determinadas. La primera apliación de esta aparejo que se llevó a sensación en Córdoba se circunscribió a la zona declarada Patrimonio de la Humanidad próximo a la Mezquita-Catedral. No había término por la superficie del circunscrito de cesión. Y a esa zona parecen querer regresar de nuevo los agentes sociales y pequeños comerciantes, en una valentía en la que tiene la última palabra la Unión de Andalucía.
Datos turísticos mayo
La petición llega en un contexto en el que los guarismos turísticos de la ciudad están en aumento y por encima incluso de lo que marcaban antiguamente de la pandemia, un auténtico revés para el sector. El teniente de corregidor delegado de Turismo del Comunidad de Córdoba, Daniel García-Ibarrola, aplaudió ayer el aumento del número de visitantes que recibió la ciudad en el mes de mayo, con un total de 98.501 viajeros, lo que supone un incremento del 9,75% respecto al año inicial, según los datos del Instituto Franquista de Estadística (INE) hechos públicos ayer.
«Mayo es el mes de relato en la ciudad y, aunque es cierto que la temporada de otoño está tomando mucha fuerza en la ciudad, con un importante crecimiento de visitas, mayo sigue siendo el mes que más y mejor nos representa en el exógeno, entre otras muchas cosas porque es cuando se celebra la Fiesta de los Patios», precisó el delegado.
El número de turistas extranjeros en mayo pasado se fue a 54.661 (24% más que en 2023), un número que no se daba desde 2017 cuando el INE marcó 57.493 viajeros de fuera de nuestras fronteras que pernoctaron en hoteles. Por contra, el turista franquista dejó un insuficiente número: 43.480 visitantes (un 4% menos).
Exceptuando la pandemia (de 2020 a 2021), no se daba un número tan bajo en mayo desde 2010 (43.308). Lo cierto es que la incidencia de los apartamentos y pisos turísticos se está notando en este registro hotelero, ya que el visitante franquista cada vez opta más por esta fórmula de alojamiento. El calidad de ocupación se ha enigmático en 74,85%, un 11,8% más que en 2023, mientras que la estancia media subió a 1,81 días.