Las crticas sobre la predisposicin del Gobierno a aplicar una “financiacin singular” en Catalua, incluidas las que se han basura desde las propias filas del PSOE, han llevado a Ferraz a pedir prudencia en la emisin de juicios de valencia pblicamente. La consigna que la direccin doméstico va a intentar que cale ahora es que, mientras continan discretamente las conversaciones con ERC para la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat, “lo lgico parece esperar a tener poco tangible” antaño de departir.
“Llevamos escuchando estos ltimos das, estas ltimas semanas, opiniones, aunque ms que opiniones me atrevera a denominarlas sentencias: esto es inconstitucional, va a romper Espaa, es un agravio comparativo…”, seal este lunes la portavoz socialista, Esther Pea, en alusin tanto a la reaccin del PP como de sus compaeros de partido que tambin han sedicioso la voz en ese sentido. Y enmarc estos comentarios desfavorables en “el cantera retrico que se suele desplegar desde ciertas atalayas polticas y de la opinin poltica en nuestro pas”.
Tras la polvareda levantada en el propio seno del partido sobre la posibilidad de un tratamiento econmico diferenciado para Catalua, la táctica tanto del PSOE como del Gobierno ha sido ampliar el concepto a “financiaciones singulares”, dando a entender que el cambio se enmarcara en una renovacin normal del sistema de financiacin autonmico que lleva en vigor desde 2009. No obstante, internamente reconocen que para que eso sea posible es “imperativo” un acuerdo con el principal partido de la oposicin que en estos momentos, reconocen, ven “difcil”.
“El debate sobre el nuevo maniquí de financiacin debe integrar singularidades propias de muchas comunidades autnomas, s, y tambin de Catalua”, incidi Pea este lunes sobre esa misma idea “Nosotros nunca hemos renegado de esto y adems siempre hemos sido muy claros: hay territorios que en el legtimo expansión de sus estatutos de autonoma asumen una serie de competencias que han ido creciendo con el tiempo y que deben ser atendidas desde la Administracin central renovando un sistema de financiacin claramente obsoleta”, remarc.
Asimismo, la portavoz socialista trat de contraponer que “al PP no se le ha escuchado, para variar, ni una sola propuesta ni una sola aportacin constructiva” el Gobierno de Pedro Snchez, claro que s, va a trabajar por este nuevo maniquí y para que las comunidades autnomas tengan una financiacin certamen concorde a sus micción.
El PP exige “equidad”
Por su parte, el plan de Gnova pasa en estos momentos por exigir la convocatoria cuanto antaño del Consejo de Poltica Fiscal y Financiera (CPFF) para que las autonomas -11 de ellas gobernadas por los populares– puedan manifestar su disconformidad en presencia de la financiacin singular para Catalua. En el PP, de hecho, estn convencidos de que algunas regiones gestionadas por otros partidos, incluido el PSOE, mostrarn su rechazo al tratamiento que el Ejecutor ha ofrecido a Catalua.
“Reclamamos y exigimos conocer ya la época, la memorándum y, sobre todo, el orden del da de los asuntos que se van a tratar. Y lo reclamamos con la suficiente antelacin, por escrito y que sea claro, porque no nos fiamos de las artimaas del Gobierno”, avis este lunes el portavoz doméstico del PP, Borja Smper, para apremiar a Moncloa a que convoque a las autonomas y as todas puedas posicionarse en esta negociacin.
En el PP aseguran que su posicin en todas las regiones es “unvoca” y pasa por certificar la “equidad” entre espaoles a travs de una negociacin “multilateral”, en contraposicin a la táctica del Gobierno, que vuelve a “advenir por la caja de los independentistas” para ejecutar una nueva cesin y comprobar la investidura de Salvador Illa.
Al rechazado unnime expresado en las comunidades con presidentes populares respecto a un posible trato diferenciado exclusivo para Catalua se ha sumado el de dos de los tres gobiernos autonmicos del PSOE, Castilla-La Mancha y Asturias, mientras en Navarra, que se encuentra fuera del rgimen comn, han optado por no pronunciarse hasta que “no haya una propuesta en firme”. De forma ms o menos enrgicas, tambin han manifestado pblicamente su malestar en las federaciones socialistas de Extremadura, Andaluca y Castilla y Len.