El pleno del Comunidad de Santiago ha admitido la norma que regula la comunicación de las viviendas de uso turístico (VUT) con el voto propicio de los concejales del PSOE, que incumplen así la directriz de la dirección específico del partido que apostaba por la inhibición, así como de las formaciones del gobierno municipal –BNG y CA–. Por su parte, los populares han votado en contra.
“Somos plenamente conscientes de las consecuencias y hoy decidimos ser leales y consecuentes. Leales con la ciudad” y con lo que defiende “el PSOE en España y en Galicia”, ha dicho la concejala socialista Mercedes Rosón en una intervención en la que se ha mostrado visiblemente emocionada y en la que ha sostenido que optar por la inhibición, como así exige la dirección específico, tendría el “mismo resultado que sufragar en contra y sería, en esencia, “no apoyar un texto que, aún siendo un trámite chupatintas, parte de una medida socialista”.
Tras señalar que fue el gobierno socialista liderado por Xosé Sánchez Bugallo y del que formaba parte el que puso en marcha con “valentía” la presente regulación, ha dicho que la inhibición sería caer en el “tacticismo político” simplemente por agenciárselas una derrota del presente gobierno. “Caeríamos de inmediato en lo mismo que acusamos a la señora Sanmartín, ha dicho en relato a la inhibición del BNG en el pasado mandato.
Tras conocerse la atrevimiento de los seis concejales socialistas, tanto el regidor de Urbanística, Iago Lestegás, como la propia alcaldesa, la nacionalista Goretti Sanmartin han trasladado su agradecimineto a los socialistas por la valentía.
La regidora ha afirmado que esta norma culmina un proceso iniciado ya en otros mandatos con el objetivo de promover un primer uso residencial y consolidar un ámbito de estabilidad norma de cara el futuro.
La norma que el Ejecutor específico ha llevado al pleno extraordinario de este lunes fijaba el modo de comunicación, los requisitos y la documentación que deben incluir las personas que quieran ofrecer una vivienda como alojamiento hasta un mayor de 60 días al año, siempre que sea el ocasión de residencia habitual de una persona física y todavía el arrendamiento turístico de determinados cuartos en la propia vivienda o estancias en la vivienda habitual.