Aston Martin y Fernando Alonso nos acostumbraron a lo mejor y ahora, Tras la peor carrera del asturiano (la última en Singapur), son muchos los que se ponen las manos en la cabeza. El Gran Premio por las calles de Marina Bay quedó marcado en rojo en el calendario para el equipo y el piloto, que aspiraba al menos al podio, sin embargo, La realidad no podría ser más diferente.
El cara del Oviedo tras bajarse del coche y atender a los medios era un poemasus declaraciones ante el micrófono de ‘Dazn’ dan buena prueba de ello.
El Alonso más decepcionado de la temporada
El periodista le preguntó por lo mal que le había ido todo durante las 62 vueltas del GP, ‘Magic’, con expresión sombría, se hizo más breve que nunca: “La carrera fue para olvidar, No teníamos ritmo, fue complicado desde el principio. Para ver en Japón…”, anotó un Alonso más que decepcionado.
El bicampeón del mundo acabó último (15º) en la que sin duda fue la peor carrera de la temporada, y no fue una cosa sino varias, todo lo malo se juntó en un solo día.
Las claves de la peor carrera de Alonso
- Daños en la suspensión: En varias imágenes se puede ver cómo se desprende un trozo de la suspensión en la vuelta 2.
- sin ritmo: Ninguna velocidad en recta y poco rendimiento en curvas, donde se esperaba que Aston Martin fuera uno de los más rápidos.
- Mucho tráfico y una vida después de Checo Pérez: Alonso estuvo mucho tiempo detrás de varios coches pero gran parte de la carrera se fue al carajo cuando tardó una eternidad en adelantar a un checo con neumáticos duros y con más de 30 vueltas.
- penalización de 5 segundos: Se sobrefrenó al entrar al pitlane con el SC en pista y a pesar de no sacar ventaja, más bien perdió tiempo, fue penalizado.
- Desastrosa parada de 30 segundos: Al entrar a boxes algo se atascó, los mecánicos tardaron en arreglarlo y Alonso salió a pista a los 55 segundos en el pitlane (estaba en la cola).
- frena demasiado: Fernando, que no se encontraba nada cómodo con el AM23, frenó demasiado al volver a pista y perdió mucho tiempo, algo que le situó en la última posición de la carrera (“Esto es inconducible”, dijo por radio) .