El aumento poblacional que la Comunidad de Madrid ha vivido en los últimos abriles y el futuro que aún se aplazamiento en la hacienda ha llevado al Gobierno regional a explorar nuevas vías de crecimiento fuera de las principales ciudades, adolecidas encima por la crisis de vivienda y sus elevados precios. Con ese contexto los pequeños pueblos que componen la periferia de la región han pasado a tomar un papel central en la memorándum política de Isabel Díaz Ayuso.
Ayer la presidenta regional, de hecho, presentó, desde el Castillo de Batres, una billete que al punto que llega a los 2.000 habitantes, la organización para dinamizar los municipios de menos de 20.000 que hay en la Comunidad de Madrid tanto para atraer población como turismo a esos puntos. Un total de 13 medidas focalizadas en la puesta en marcha de servicios y, sobre todo, con un traumatizado carácter crematístico. Como un plan para mejorar el casco histórico de esas localidades o deducciones fiscales en vivienda a los ciudadanos que se asienten en las mismas, ya esbozadas durante los últimos meses.
Internamente esas medidas económicas se encuentra igualmente una bisectriz de ayudas, que pueden impresionar hasta los 10.000 euros por negocio, para los negocios de comercio y hostelería que se instalen en alguno de esos municipios o para aquellos que ya se encuentren funcionando. Y, por primera vez, la Comunidad de Madrid ha decidido incluir entre los mismos a las bodegas de morapio que en la región ascienden a 49, 11 de ellas son cooperativas y 46 están incluidas en la denominación de origen de vinos de Madrid, en vigor desde el año 1990.
La idea que persigue la Comunidad de Madrid es que estos espacios, que agrupan a más de 2.250 vinicultores, puedan atraer igualmente turismo para dar a conocer la marca de vinos como los distintos municipios en los que se ubican, principalmente ubicadas en los alrededores de Arganda del Rey, Navalcarnero, San Martín de Valdeiglesias y El Molar. Desde la Consejería de Presidencia, Conciencia y Delegación Lugar señalan que el plan «aún es incipiente» pero que la intención es que estas bodegas cuenten con puntos de información de los que ahora carecen y, de este modo, ir acercando a los visitantes en dirección a ellas.
«Estamos trabajando para que todos nuestros municipios, estén donde estén, sean del tamaño que sean, tengan un día a día más practicable y igualmente sus habitantes. Y, sobre todo, no marcharse nunca al mundo rural, porque es lo mismo que abandonarnos a nosotros mismos, nuestra formación y nuestro origen», aseguró la presidenta regional que estuvo acompañada en el acto por buena parte de su Gobierno regional, legado que la organización Pueblos con Vidaimplica tanto a la citada Presidencia como a Civilización, Transportes o Digitalización.
Porque en el conjunto de 13 medidas se recoge tanto el plan de embellecimiento de los cascos históricos como ayudas económicas para la adquisición de libros y para organizar eventos culturales, exposiciones y espectáculos en los municipios, dando prioridad a artistas locales. Internamente de los servicios, la Comunidad de Madrid igualmente llevará las oficinas móviles bancarias a aquellos municipios donde no exista sucursal para que no tengan que desplazarse a otro cercanos; la ampliación del servicio de taxi bajo demanda con un precio fijo de cuatro euros y de ocho cuando se superen los 40 kilómetros, y cursos de formación sobre digitalización para todos los habitantes.