Ourense “exporta” sus discomóviles a Asturias y León



El nuevo panorama de las verbenas ha generado nuevas oportunidades. Y algunos músicos estaban en el área y momento adecuados para engrosar sus proyectos e incluso lanzarse a la carretera en un panorama de mengua.

Ayer éramos un plato secundario en una verbena, y ahora somos protagonistas

Ha sido el caso de la discomóvil A Gramófono, con 15 abriles de experiencia, y que en estos momentos ya empieza a cuadrar fechas para 2025. Su responsable, Marcos Domínguez, explicaba que “estoy notando que ayer éramos un plato secundario en una verbena, y ahora somos protagonistas. La fanfarria, por supuesto, es un símbolo de la verbena gallega, y así debería ser de por vida. Deberíamos conservarlo”. Sin incautación, Domínguez añade que “a lo mejor el viernes, con la primera viaje de fiesta, la discomóvil está cogiendo preferencia entre el manifiesto muchacho”.

A Gramófono afronta el verano con la dietario llena, pero solo un puñado de actuaciones serán en casa. “En estos momentos, el 90% de nuestro trabajo es fuera de la provincia”, explica Domínguez. Aunque sí que se ven mucho por Ourense, Ribadavia, Verín o Carballiño, “la anciano parte de los shows son en Castilla y Valeroso, e incluso en Madrid”, puntualiza el DJ.

Una situación parecida le ocurre al reunión Tattoo, nacidos en Amoeiro. Su responsable, Alberto Otero, explicaba que “el 30% será en Asturias, otro 30% en Valeroso, otra parte en Ourense, donde ya tenemos 11 o 12 fechas, y el 10% restante por toda Galicia”. La formación se puso en marcha hace tres abriles, en plena postpandemia, y en el mundillo de la verbena se comenta que es el reunión que más fuerza ha reses. Otero lo achaca a sus integrantes. “La verdad es que los fichajes ayudaron. Lucía viene de la París de Noia. Unai caldo de la New York, Yenina de la Filadelfia y Cristian, que estaba en Cantareiros, es un tío que cae muy perfectamente. Luego… músicos tenemos todos de primera, como Sebastián Mato que era el guitarrista de América y Calxxon, la bajista Fania Blanco…”, enumera el músico.

Respecto al rumbo que han tomado las fiestas, Marcos Domínguez matiza que no deben estar las discomóviles como competencia, sino como un añadido a las verbenas. “La muchedumbre muchacho no iba ayer a las verbenas y ahora sí, no estamos quitando cero. La discomóvil aporta más muchedumbre a las verbenas. No está quitando a nadie, está ocupando un nuevo área”, explica Domínguez. Alberto Otero, de Tattoo, cree que dependerá de las comisiones. “Si no puedes traer una formación, pues tendrás que optar por poco más pequeño, como un dúo o una discomóvil”, comenta Otero. “Para nosotros será perjudicial, porque perdemos fiestas; pero si no puedes pagarlas, tendrás que hacer fiestas más pequeñas”, añade.

Materiales heredados y nuevas oportunidades

La versatilidad de las discomóviles les permite todavía explorar oportunidades de recital fuera del circuito tradicional de verbenas. Carlos Crespo, apoderado de La Duendeneta, explica que “o noso caso é singular, porque traballamos tamén os festivais. Aí non aparecen tanto esas grandes discomóbeis. No Ourensound facemos case de segundo tablas durante os cambios de reunión”. La Duendeneta ha notado esa preferencia por parte del manifiesto, y para este verano negocia actuaciones de Ribadavia y en la Festa do Pemento de Arnoia, con su presencia ya confirmada en las fiestas de Maceda. 

Crespo todavía cuenta que si hay discomóviles que están en condiciones de competir con una fanfarria es porque durante la pandemia hubo un trasvase de equipos entre uno y otro perfiles de recital. “Hai moitas discomóbeis que empregan o camión e os equipos das orquestras despois de adaptalos para a cabina de DJ”, explica el apoderado de la Duendeneta. “Cando comezamos hai 12 anos, non existía ese concepto de discomóbil cun camión alto e xogos de luces”, comenta.

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