Pese al respiro meteorológico de estos días, el peligro de que el fuego arrase con los montes ourensanos sigue presente. A estas gloria del año, el Índice de Risco Diario de Incendio Forestal (IRDI), minucioso por la Consellería de Medio Rural, advierte de que la amenaza es elevada.
La gran mayoría del zona de Ourense está, como intrascendente, bajo un aventura suspensión de incendio. Solo se libran las zonas más elevadas del Lleno Central y del finalidad del concello de Viana. En estas áreas, el aventura es moderado, según el atlas publicado ayer. Mientras tanto, la comarca de Monterrei y el entorno del valle del Miño permanecen bajo aventura muy suspensión de incendio forestal. Este nivel, el segundo más suspensión, asimismo afecta a varias zonas de las comarcas de O Ribeiro y Celanova.
La situación es todavía más crítica en el valle de Valdeorras, las zonas más bajas de la Baixa Limia y algunos puntos del concello de Vilardevós. En estas áreas, el nivel de aventura era extremo, el más peligroso de todos.
De momento, los incendios forestales están dando un respiro en Ourense, pese a que es la provincia gallega más castigada por el fuego. El Plan de Prevención e Defensa contra Incendios Forestais (Pladiga) establece un lista de 40 parroquias calificadas como de adhesión actividad incendiaria. De ellas, 28 están en la provincia.
La meteorología está acompañando para evitar los fuegos en el puesta en marcha de este mes. Las temperaturas ayer fueron relativamente moderadas, con 29 grados de máxima en Leiro. El termómetro no pasará hoy de los 30 grados en la ciudad, según las previsiones de Meteogalicia, y se retraso que por la sombra regresen las lluvias. Estas precipitaciones se podrían extender durante la marcha de mañana, con una declinación del mercurio hasta los 23 grados.