La asamblea plenaria de la Conferencia con sólo una privación el documento presentado por la cúpula obispal pero sin incorporar ni una sola de las exigencias del Gobierno. Diversas asociaciones de víctimas, que estaban invitadas al pestillo de la reunión, no han acudido. El presidente y metropolitano de Valladolid, Luis Argüello, ha sido nítido en su respuesta al Gobierno que pone en duda el plan por considerarlo independiente: “La Iglesia tiene sus reglas de funcionamiento para las que pedimos el respeto de toda la sociedad y de las administraciones públicas. Es nuestra intrepidez franco y replica a una obligación no jurídica sino recatado. Sí, asumimos una obligación unilateralmente, por propia iniciativa. Claro que es independiente”.
El documento con las Líneas de trabajo, que incluyen el PRIVA -Plan de Reparación- , se refiere a los Criterios orientadores para la reparación integral para las víctimas de abusos sexuales a menores de tiempo o adultos equiparados en derecho. Son cinco líneas. La primera es “Rebuscar y reparar”. “En esta crencha”, dice el documento de la Conferencia “se encuadra el examen y la reparación simbólica a través de la adhesión al acto sabido de examen a las víctimas; el examen y reparación de las víctimas de abusos sexuales prescritos o en los que el victimario ha fallecido; y el examen y reparación de aquellos casos en los que la entusiasmo penal no ha prescrito. Esta crencha de trabajo incluye la elaboración del Plan de Reparación Integral a los menores y personas equiparadas en derechos, víctimas de abusos sexuales”.
Un segundo es atender a las víctimas y/o supervivientes y el tercero “advertir: continuar la difusión en los centros educativos de la Iglesia de la “Supervisión para la prevención y reparación de abusos sexuales a menores en centros educativos” publicada por Escuelas Católicas. Adicionalmente de comprometen a trabajar en la implantación en los centros de la figura del coordinador de bienestar y protección. Adicionalmente abogan por “formar y sensibilizar“, es afirmar, apañarse la formación de los profesionales en contacto con personas menores de tiempo en materia de violencia sexual; y la sensibilización con la difusión de las medidas de prevención y protocolos de las instituciones educativas de la Iglesia. Por postrer se comprometen a informar e investigar, cualquier tipo de violencia sexual.
Conflicto con el Gobierno
El presidente de la Conferencia Obispal no ha pedido directamente que Presidencia no se inmiscuya en la ocupación de la Iglesia, aunque de forma implícita hacía este llamada: “Estamos dispuestos a una noble colaboración en lo que corresponde a las responsabilidades propias de cada cual. Y la del Gobierno es con todas las víctimas”, ha precisado haciendo hincapié con el tono de voz la palabra “todas”. A la invitación a Bolaños de “abarloar el hombro para avanzar juntos en la opción”, le ha seguido un aviso: “Desde una observación parcial o sesgada, difícilmente es posible asistir a acuerdos”, respondía con contundencia el metropolitano al ministro de la presidencia.
Por otra parte, adentro de la comisión que estudiará las situaciones y prevenciones, no se prevé la presencia de representantes de las víctimas. Este aspecto es polémico, según Presidencia de Gobierno. El presidente de la Conferencia ha replicado repitiendo en varias ocasiones que “queremos escuchar a las víctimas” y ha ducho que podrían ser convocadas. Sin confiscación ha matizado que dicha comisión han de formarla sólo profesionales de la jurisprudencia y de la psicología. Por postrer ha agradecido que la pederastia en el ámbito religioso “desgraciadamente se sigue dando” a pesar de que hayan bajado el número de casos en los últimos diez abriles. “Existe el pecado llamativo, una herida en el corazón. El mal toma cuerpo en las personas y se realiza”, ha concluido.
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