“Tenemos que elegir entre el infierno fiscal o poder aliviar nuestros bolsillos y llegar a fin de mes”. Carlos Mazón Dejó claro el pasado mes de mayo en una entrevista a torrevieja news today que si lograba presidir la Generalitat Valenciana “devolvería a los ciudadanos todo lo que se ha recaudado de más”.
En apenas dos meses de Gobierno, el líder del PP ya visualiza el cambio de rumbo de la política fiscal en la Comunitat Valenciana con una reducción de impuestos por valor de más de 365 millones de euros.
Carlos Mazón cumple las promesas de su programa electoral ante el aluvión de críticas de la oposición del PSPV-PSOE y Compromísque le acusan de “beneficiar a los ricos” con la supresión de facto del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Más allá de acabar con el llamado “impuesto sobre sucesiones”, el presidente de la Generalitat ha dado un paso más con una batería de deducciones en el IRPF y reducciones en el impuesto de Transmisiones, que supondrá que se queden 200 millones de euros que hasta ahora aumentaban las arcas públicas. en los bolsillos de los ciudadanos. Una medida que beneficiará a más de dos millones de valencianos (el 90 por ciento de los que presentaron).
Los contribuyentes de menor poder adquisitivo podrán deducir gastos que van desde el cuidado bucal hasta el gimnasio. Una revolución fiscal con la que Carlos Mazón Busca aliviar a las familias de la carga que supone la inflación y, al mismo tiempo, impulsar la actividad económica.
Paralelamente, el presidente de la Generalitat acomete la reducción de la “grasa administrativa” heredada del anterior Ejecutivo de Ximo Puig en forma de altos funcionarios y asesores. Según los cálculos de Carlos Mazón, presentados en su primera entrevista con torrevieja news today tras ganar las elecciones, a corto plazo, más de 600 millones son prescindibles rápidamente sólo en el gasto corriente del sector público y en la reducción administrativa de asesores, entidades ,