Vigo conoció este martes la noticia de la okupación de un yate que ha sido noticia por su carácter esperpéntico. Se trata de una pareja, Una mujer y un hombre aparentemente bajo la influencia de drogas., que accedieron el lunes a una embarcación del Club Náutico en la que rompieron parte del mobiliario e incluso defecaron en el suelo. Según informa El Faro de Vigo, el propietario advirtió al día siguiente la presencia de dos desconocidos en su propiedad y avisó a las autoridades, que procedieron a su detención sobre las 17.00 horas, según confirmó la Policía Nacional. ciudad.
Sin embargo, el Real Club Náutico de Vigo asegura que se trata de un caso aislado, y que no se trata ni de una “cuestión de medidas de seguridad” ni de un problema del Náutico, del buque o de la Autoridad Portuaria. “El problema lo veo en lo incivilizada que es la gente”, explica el presidente, José Antonio Portela. “Hay que partir de que el puerto va desde Teis hasta Bouza”, afirma, un total de 5 kilómetros que son “imposibles de controlar”. En total son unas 300 embarcaciones a las que sus propietarios y sus familiares tienen acceso con llave, “más de mil personas” que no pueden ser vigiladas constantemente. Las instalaciones del puerto deportivo cuentan con marineros durante el día y, por la noche, además de Cámaras de vigilancia dispuestas en todos los muelles. Operando las 24 horas del día, hay guardias de seguridad que controlan el local.
“La seguridad por nuestra parte está bajo control”, afirma, “pero no podemos saber quién entra en un barco en un momento determinado ni si el propietario le ha dado permiso”.
«Los pontones están a la altura de la acera»
Los okupas, ya identificados por la Policía Nacional, se colaron en el puerto la noche del lunes por el recién inaugurado paseo marítimo de As Avenidas. «Cuando sube la marea los pontones están prácticamente a la altura de la acera«y »el que quiere saltar, salta«. Sin embargo, Portela destaca que no tienen »ninguna queja« y que se trata de una »obra magnífica« tanto para ciudadanos como para turistas y con la que todos están »encantados«. El problema no es que la obra o el puerto estén »mal construido«, sino que »la gente es incivilizada« y puede haber algún »loco« que genere altercados de este tipo.
En este caso, el presidente del Real Club Náutico de Vigo explica que los detenidos se encontraban bajo los efectos de drogas, y que el informe reflejaba que “eran dos yonquis como la copa de un pino”. “Rompieron el microondas, una barandilla y botellas” Señala, “e incluso defecaban en el suelo” teniendo un retrete disponible. “Lo que hace falta es policía que vigile la botella” ya que la zona marítima de la ciudad gallega resulta especialmente atractiva para quienes buscan un lugar para salir de fiesta por la noche. De hecho, el problema no suele estar en el puerto, sino en tierra, donde se reúnen los jóvenes “como en todas las ciudades”, apunta.
“Quien quiera entrar, entra, aquí y en cualquier lugar”, y esto es “una cuestión de educación y de civismo”. De hecho, el Club Náutico de la ciudad gallega no suele sufrir incidentes de este tipo, y sonCasos tan llamativos como aislados. Para hablar de la última situación similar, en la que un barco fue asaltado, tenemos que retroceder una década en el tiempo, y las intrusiones en el puerto son igualmente raras. “Hace dos años tuvimos un altercado con unos extintores”, cuando unos intrusos abrieron su contenido contra las embarcaciones en el muelle, pero “llaman a la policía, se los llevan y listo”. “Son cosas excepcionales” y, insiste Portela, “el problema es la botella”.
Al día siguiente, miércoles, se procedió a la limpieza del barco, a cargo del Real Club Náutico como gesto de buena fe.