La transformación de La Palma 34 meses después del volcán


Encima de documentar la reconstrucción y el avance de las obras de recuperación de infraestructuras viarias, viviendas y plataneras que quedaron sepultadas bajo metros de escoria, I Love The World vuelve a poner de nuevo sus drones y cámaras de forma altruista al servicio de la población afectada que continúa demandando información de la presente situación en la que se encuentran sus propiedades, los terrenos y viviendas que quedaron arrasados por la erupción del volcán Tajogaite. Para atender estas peticiones vecinales realizan fotografías en 360º que ponen a su disposición en sus redes sociales. Igualmente examen documentar todo el proceso de recuperación para contribuir a un fondo audiovisual de calidad que sin oficio a dudas será de gran valencia histórico.

La reconstrucción desde el distinción

Cuando se cumplen 34 meses desde que la tierra se abrió dando paso al principio del volcán de Cumbre Vieja, desde el distinción y a través de los fanales de las cámaras y drones que opera Alfonso Escalero, director de la productora I Love The World, se puede apreciar cómo numerosas palas y excavadoras recorren la escoria solidificada construyendo carreteras y caminos que atraviesan lo que durante tantos meses ha sido zona de limitación. Las coladas de escoria arrasaron casi 74 kilómetros de carreteras y desaparecieron todavía 11 kilómetros de calles urbanas que quedaron sepultados bajo la escoria, afectando de forma significativa las comunicaciones de la isla. Igualmente se están recuperando servicios públicos imprescindibles como el alcantarillado, las acometidas de agua y electricidad.

Reconstrucción de algunas viviendas y caminos

La colada de escoria, ese impresionante faja desventurado que partió La Palma en dos, recorriendo el Valle de Aridane de ideal a sur y llegando hasta el mar por la declive oeste de la isla, presenta en la ahora, una estampa muy distinta a la que estamos acostumbrados a visualizar.

Decenas de máquinas se abren camino día a día sobre el malpaís formado por la escoria, un circunscripción irregular de 12 kilómetros cuadrados, trazando lo que será el futuro valle, con nuevas carreteras, rotondas y muchos caminos que permitirán el comunicación hasta algunas viviendas que se están construyendo. A los propietarios que tengan menos de 10 metros de escoria les permitirán recuperar sus viviendas en el mismo oficio en las que estaban edificadas.

Una de las infraestructuras viarias que se ha recuperado recientemente es un tramo de más de 2 kilómetros de la carretera que unía el morería de La Carencia y la Hoya de Todoque. Esta vía permitirá la construcción futura de otros nuevos caminos dando comunicación a muchas edificaciones en proceso de recuperación y que hasta el momento son totalmente inaccesibles. Y por otra parte es posible que esta carretera facilite consentir a lo que más delante será la nueva plaza y la iglesia del morería de Todoque que desapareció inconmovible quedando enterrado bajo la escoria.

Recuperación de cultivos

Las coladas de escoria provocaron grandes destrozos todavía a la agricultura, arrasando 369ha principalmente de plataneras y en pequeño cantidad de aguacateros. Las plataneras constituyen el principal cultivo de la isla y se vieron muy afectadas como consecuencia de la erupción volcánica.

Los terrenos de estos cultivos se encuentran al final de la colada, muy próximas al mar. Las imágenes aéreas muestran como se están recuperando muchas de estas plantaciones. Se observa cómo está cambiado todavía este paisaje campestre. La reparcelación de la zona platanera al final de la colada y el abancalado mediante desmontes del circunscripción para sembrar cultivos en la colchoneta de la montaña de La Carencia no pasan desapercibidos a los fanales de los drones, así como la modificación del color de las plataneras del secarral castaño al verde intenso, símbolo del proceso de recuperación.

Tolerancia de Puerto Naos y La Bombilla

Los núcleos urbanos de Puerto Naos y La Bombilla han permanecido cerrados desde el aparición de la erupción volcánica hasta hace escasas semanas, según la sucursal por problemas de gases, en concreto de CO2. Tras numerosos conflictos vecinales y muchas mediciones se ha demostrado que la vida puede desarrollarse con normalidad en esta zona costera y finalmente se decidió reabrir la zona. Disponen de sensores en las viviendas y megáfonos y alarmas por las calles que les avisarán de cualquier anomalía. Sus fantasmales calles vacías han hexaedro paso al turismo y al disfrute de una de las playas más emblemáticas de la isla. Y lo mismo ocurre con el morería pesquero de La Bombilla, que poco a poco va retornando a la normalidad.

Las cenizas de la zona incorporación

En este repaso por la colada volvemos al punto de origen, a la zona conocida como las Manchas de En lo alto, en la zona sur del volcán, un oficio muy cercano a la deformación del circunscripción que dio paso al principio del volcán Tajogaite. Una zona donde los drones nos han mostrado que, a excepción de alguna casa muy concreta, aún hay construcciones que permanecen enterradas varios metros hasta las mismas chimeneas bajo toneladas de cenizas. En cambio en el cementerio se retiraron las cenizas pero quedó destruido por la escoria que lo sepultó parcialmente. Es un espacio detenido en el tiempo donde no se observan cambios significativos desde que se apagó el volcán, hace casi tres abriles. En cambio, lo más resultón de esta zona es observar desde el distinción la recuperación del campo de futbol y la pista de atletismo de Las Manchas. Una vez retiradas las oscuras cenizas recuperó su césped verde.

La Isla Bonita resurgirá de sus propias cenizas

Al igual que se describe en el ulterior párrafo sacado del manual solidario para ayudar a la población afectada por la catástrofe volcánica Las otras historias del volcán y editado por I Love The World, la isla de la Palma resurgirá de sus propias cenizas:

“Cuenta la inscripción que el Ave Fénix vivía en el Paraíso y anidaba en un rosal. Entre sus dones tenía el poder del fuego y la luz, pero el poder más destacado es el de la inmortalidad que poseía por su capacidad de renacer, una y otra vez, de sus propias cenizas. Siempre fue único y siempre será perenne.

Y así fue y así será la isla de La Palma, única y eterna

Inmortal porque al igual que el Ave Fénix, renacerá de nuevo de sus propias cenizas, una y otra vez, tal y como siempre lo ha demostrado. Resurgirá con el poder que le otorga el fuego de sus entrañas y brillará con la luz que le brinda el sol”.

Aunque aún quedan muchas incógnitas por resolver y mucho trabajo por delante es evidente que la recuperación del Valle de Aridane está en marcha. La erupción del volcán Tajogaite fue la longevo catástrofe volcánica de Europa en el postrero siglo, una de las erupciones más importantes de los últimos abriles en las islas Canarias, y la más larga en la isla de La Palma desde que existen registros históricos. Tras 85 días y 8 horas de intensa actividad volcánica por fin se apagó para siempre.

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