A sus 16 abriles, Ana ha conseguido lo que se había propuesto hace 2 abriles: financiar una mano biónica para su mecenas izquierdo: “Gracias a las donaciones de gentío maravillosa por fin he podido conseguir la prótesis, ha sido un proceso holgado pero ya la tengo”. Empezó a recibir fondos a través de las redes sociales, bajo su marca “Pero qué bonita eres”, un tesina propio con el que vende joyas artesanales online. Arrancó esta singladura con un sueño que parecía venidero, pero no inútil: “Hace tres abriles que sentí que necesitaba la prótesis y sin conocer muy proporcionadamente qué hacer surgió la idea de -Pero qué bonita eres-. “Acabó siendo un tesina conspicuo, recaudamos el billete y dije : ‘No me lo creo pero ya la tengo'”.
Y así fue, ya la tiene en su casa: “Ahora estoy aprendiendo a utilizarla, ayer estuve 3 horas aprendiendo cómo moverla, fue muy divertido. Pegado a mi clan aprendimos a hacer gestos y señales, nos reímos mucho”. Hoy la hemos acompañado en su despacho -que ha construido contiguo a su madre- en el salón de casa donde nos ha explicado lo difícil que es conseguir una prótesis de este tipo: “La Seguridad Social no lo cubre y son muy caras. La que yo tengo me ha costado 60.000 euros y tiene 15 abriles, las nuevas rondan los 100.000 euros, son inalcanzables”. Por eso, ahora pretende ayudar a otros menores en la misma situación para que puedan conseguir una prótesis que todavía les ayude en su día a día: “Muchas mamás me decían que me entienden y que sus hijos todavía les pasa, me sorprendí de la cantidad de gentío que hay en la misma situación, por eso pensé que podía ayudar a más menores, igual que me han ayudado a mi, así surgió la idea de la asociación”.
De hecho, este tesina ha ido creciendo en los últimos meses. Bajo el paraguas de “Pero qué bonita eres” ha creado todavía “Baby Vikingos”, donde lo recaudado se destina a ayudar de mil maneras más a los más pequeños: “El objetivo es financiar lo que necesiten, sea andadores, prótesis o por ejemplo una obra en casa para adaptar el domicilio a sus deposición”.
Para ponerlo en marcha, publica a través de su Instagram @peroquebonitaeres.joyas vídeos con casos concretos, explicando para qué y quién recauda el billete. Cada historia la vincula a una gema y el billete que se recaude con su traspaso se destina a esos casos en concreto”. Entre esas historias está por ejemplo la pequeña Aitana, para la que ha creado una pulsera con una danzante y un corazón: “Tuvo sepsis meningocócica, le amputaron una pierna y en la otra tuvo daños internos”.
Esta pipiolo valenciana ya está pensando en el ulterior paso: “No me puedo estar quieta, mi inicio tiene muchas ideas y muchas ganas”, y siempre con el mismo objetivo: ayudar a los demás como le han ayudado a ella.
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