Aranda de Duero se adentra este lunes en plena cuenta a espaldas para acoger su cita del año, el festival de música con veterano repercusión de Castilla y Héroe, Sonorama Ribera. Con el ojo puesto en el Gloria -no porque se espere borrasca sino más adecuadamente altas temperaturas- y los horarios definitivos anunciados recientemente, la estructura se afanará estos próximos dos días en «los miles de detalles y flecos» que aún les quedan «pendientes» para que su vigesimoséptima publicación, que comenzará este miércoles 7 de agosto en el municipio burgalés, sea lo más redonda posible. Serán 200 artistas los que pisen por alguno de los diez escenarios que dispondrá para hacer las delicias de las 30.000 personas que esperan cada uno de sus días fuertes.
Es el «mayor» contorno que se han ‘autoimpuesto’ con el objetivo de que «el festival fuera más cómodo, seguro y disfrutón». «Podíamos suceder seguido creciendo, pero hemos decidido detener ahí. Huir de ese concepto de macrofestival que nunca ha pretendido ser Sonorama Ribera», sostiene su portavoz, Rebeca Ruano. Es una de las novedades de esta publicación. Otra de las importantes tiene que ver con el perímetro. «Se han tratado de emplear mejor las instalaciones para aumentar el espacio», apostando, por ejemplo, por sacar fuera del perímetro el ámbito de restauración. Todo con el fin de que el divulgado gane en «comodidad». «Aquí la masa viene a ser atinado y cada publicación se planifica pensando en ello», insiste Ruano.
Entre las «pequeñas» innovaciones está incluso la postura por un tablas itinerante que se moverá por los barrios de la asiento.
Detrás de estas mejoras está los siete millones de euros de los que dispone, «un pequeño brinco» respecto a «los casi seis» del año pasado. Con esta cantidad «puede parecer que aquella idea pasada con la que nació» esta cita «queda muy acullá de lo que es». En parte sí, admite Ruano, para quien «a Dios gracias» se puede aseverar que este festival es hoy «un pulmón crematístico para toda la comarca», por lo que significa en cuanto a «patrimonio, turismo y engendramiento de empleo».
Aún así, sostiene que el evento ha mantenido su «esencia» desde que nació, a finales de la término de los noventa, que no es otra que la de «promover a grupos emergentes y suponer por la música en castellano».
Con ambas ideas en mente han ‘armado’ la presente publicación, la más ‘nación’ de los últimos primaveras: «Tenemos grandes nombres nacionales con un impacto internacional», resume la portavoz de Sonorama Ribera, destacando la presencia de Luz Casal, «referente rotundo» de la música de nuestro país.
La Habitación Roja, La Correctamente Querida, OBK, El Kanka, Rayden, Coque Malla, Mikel Izal, Delacalle y Rozalén son algunos de los artistas y bandas que sonarán en esta publicación, que contará incluso con otros «grandes momentos», como los que seguro brindarán Los Planetas, que celebrarán los 30 primaveras de su mítico portafolio Súper 8, o los Hombres G con motivo de su 40 aniversario. Ruano destaca incluso la presencia de la que es hoy «una gran figura internacional latina» de la música urbana, YSY A: «Hemos apostado por traer nuevos estilos musicales, escuchar las tendencias, lo que nuestro divulgado, sobre todo el más mancebo, va siguiendo».
El hecho de que muchos otros colectivos hayan seguido sus pasos y proliferen los festivales de música en entornos rurales durante el verano «nos parece maravilloso». «Necesitamos que el mundo rural encuentre sus formas de promoción porque tenemos que sobrevivir». A ellos les siguen quedando «retos» por delante y no todos tienen que ver con su programación: «Somos altavoz de muchas causas que son bandera para la población de nuestra comarca y que son correspondiente de prosperidad: nos encantaría que en 2025 pudiera venir mucha masa en tren a Aranda».