Illa consigue el voto 68 al ser ratificado por los jóvenes secesionistas


Las juventudes de ERC han confirmado este lunes su apoyo al preacuerdo suscrito por la dirección del partido con el PSC y ratificado por las bases de los de Marta Rovira. Con el aval de las Joventuts d’Esquerra Republicana (JERC), Salvador Illa, líder del PSC y candidato a la presidencia de la Generalitat de Cataluña, consigue los 68 apoyos necesarios para la investidura: los 42 de su partido, los seis de Sumar y los 20 de ERC, incluido el voto de Mar Besses, la representante de la ordenamiento vivaz, entidad que este lunes decidió, en un consejo franquista dedicado en monopolio a este asunto, si secundaba la posición adoptada por las bases del partido que lidera Marta Rovira.

De esta forma, las JERC apoyan el concierto financiero para Cataluña, así como todo lo que se recoge en el documento firmado por ERC y el PSC, a cambio de que Illa sea el próximo presidente de la Generalitat. Esta valentía, aprobada ayer, rectifica la opinión que la ordenamiento emitió en junio, una vez que el independentismo se hizo con la Mesa del Parlamento catalán.

Entonces, a mediados de junio, las JERC señalaron que «no podemos permitir que el unionismo se apodere del Govern» y acusaron a Illa de «capitanear» un maniquí de Cataluña «con la derecha más sucursalista» en diversas materias como la vivienda, el turismo o yendo «en contra de la defensa del catalán». Por eso, entonces advertían de que siendo «coherentes y exigentes» y defendiendo el referéndum de independencia, no tendrían ningún problema en retornar a las urnas. Es proponer, a una repetición electoral. «A nosotros, no nos dan miedo las urnas», concluían.

Así, el voto disputado de Besses ya tiene color. La fresco respira tranquila y votará lo mismo que los 19 compañeros de bancada. Besses lleva desde el viernes bajo el foco mediático. Tiene 26 primaveras, recién cumplidos, el 6 de julio, y entró en política en 2014, coincidiendo con la consulta independentista de Artur Mas. Como el resto de sus correligionarios de filas es una convencida independentista.

El voto ya tiene color

Besses vive con sus padres y es entusiasta de la danza contemporánea, diversión practicada durante 15 primaveras y que abandonó por sus obligaciones políticas, aunque afirma tener «el propósito de retornar a cabriolar». Pese a su mocedad, tiene una larga trayectoria en la política municipal de su Sant Joan Despí (Barcelona) oriundo, ciudad en la que es concejal por ERC desde las elecciones locales de 2019.

Además fue consejera de Nubilidad del Consejo Comarcal del Bajo Llobregat en representación de las JERC, ordenamiento de la que es secretaria de política municipal. Pero el primer contacto que tuvo con la política fue a los 16 primaveras, cuando organizó un reunión de jóvenes para «movilizarnos y participar en la consulta» independentista del 9N en 2014.

Es graduada en Ciencias Políticas y Administración Pública por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) y postgrado en Derecho Internacional Humanitario y Honradez Penal Internacional por la UOC, incluso ha cursado un máster en Políticas Públicas, Derechos Sociales y Políticas de Igualdad en la Universidad de Barcelona.

En una entrevista publicada en el ‘Anuari 2024 Next Llobregat’, realizada ayer de que se conociera que su voto en la investidura de Illa era determinante, proclamó pertenecer a una gestación que «hemos crecido rodeados de crisis y por eso somos inconformistas y movilizados». En ese sentido, cree que «es urgente repensar es el sistema hipercapitalista y avanzar con destino a un maniquí más sostenible y equitativo donde los títulos sociales sean los que imperen».

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