Como ha declarado el portavoz adjunto del secretario de Naciones Unidas, Farhan Haq, “lo que hemos visto ha sido retrocesos casi semanales en Afganistán durante los últimos dos años”. Dice que estas prácticas alejan cada vez más a las mujeres y niñas del país de derechos humanos que les corresponden “Esto es alejar al país del desarrollo que debe tener cualquier otra nación”, dijo el vocero.
Hap también ha pedido a “aquellos con influencia” y “líneas directas de comunicación” que las utilicen en beneficio de las “mujeres y niñas” afganas. Por su parte, la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Sima Bahous, se ha pronunciado directamente sobre “asalto” contra la población femenina, el objetivo directo de más de 50 edictos que “no han dejado sin examinar ningún aspecto de la vida de las mujeres, ninguna libertad”. Los talibanes, añadió, “han creado un sistema basado en la represión masiva de las mujeres“.
“A pesar de los desafíos, las mujeres afganas también me dicen que nunca se darán por vencidas. Seguirán liderando la lucha contra la represion. Ante las circunstancias más hostiles, denuncian los abusos, prestan servicios esenciales, poseen y gestionan empresas”, dijo Bahous, que este año visitó Afganistán. Además, el director ejecutivo subrayó que ese “coraje” es un “ejemplo” y ha instado a la comunidad internacional a alzar la voz para seguir presionando al régimen afgano y recuperar derechos renunciados en estos dos últimos años.
han pasado dos años
Desesperado. Así eran los afganos y las afganas hace dos años cuando todos querían subirse a un avión para huir. la toma de Kabul por los talibanes el 15 de agosto de 2021 significó, entre otras cosas, grandes límites y el fin de los derechos de las mujeres.
Savira es una de ellas. En todos los momentos de tensión que ha sufrido el país estuvo sola: “Estaba en mi cuarto encerrado y muy asustado. Lejos de mi familia porque mi familia era refugiada en Irán”.
Las protestas fueron numerosas pero no detuvieron la yihadistas impusieron sus propias reglas: privaron a miles de niñas de una educación académica, cortaron acceso a universidades mujeres y les prohibía trabajar, entre otras ‘reglas’. Savira es una de tantas mujeres que tiene grandes aspiraciones, sueños que se han visto truncados por los talibanes: “Tengo muchas ganas de estudiar medicina, muchas”.
la pobreza se intensifica
Hay casi un millón de niñas que deberían estar en la escuela, aprendizaje y formación, pero no lo son debido al régimen talibán. Ahora, dos años después, la situación del país no ha hecho más que empeorar: “Hay 28 millones de personas que necesita asistencia humanitaria y casi 900.000 niños y niñas estarán desnutridos este año”. La pobreza asfixia cada vez más a las familias, que tienen dificultades para llevar comida a casa.
Una triste realidad a la que mujer del país se enfrentan hoy. Estudios, trabajos y sueños que no se pueden realizar en afganistán moderno.